¿Y los helicópteros del gobierno del estado?
Un detalle que hasta ha pasado inadvertido es la suspensión de los vuelos de los tres helicópteros del gobierno.
Un detalle que hasta ha pasado inadvertido es la suspensión de los vuelos de los tres helicópteros del gobierno del estado: el Bell 407, el Agusta Koala A 119 y el Agusta 109 S bimotor. Las tres aeronaves están varadas desde finales de octubre o principios de noviembre, de manera que los veintitantos empleados del hangar oficial, entre pilotos, mecánicos, técnicos, analistas y administrativos, están sin hacer prácticamente nada desde hace más de dos meses. El Bell 407, de color blanco con matrícula XC HPZ, sufrió una ingesta en la turbina, por lo que tiene el motor averiado, sin que nadie sepa cuál fue la exactamente la causa. Los directivos del hangar quisieron culpar al taller STAM, que hizo una reparación mayor al helicóptero, pero como éste no aceptó el reclamo, aquellos voltearon entonces a la empresa Rotor Flight Service que tenía a su cargo el mantenimiento de la aeronave. Los Agusta también están sin volar porque es la hora que no reciben mantenimiento, porque no hay taller para prestar los servicios requeridos por las aeronaves y porque las licitaciones convocadas por la Secretaría de Administración para tal fin se han cancelado, porque las cotizaciones de las empresas participantes rebasaban el techo presupuestal o porque las firmas que adquirieron las bases eran insuficientes para llevar el concurso. El caso es que los tres helicópteros del gobierno del estado no sólo han dejado de ser utilizados como ambulancias médicas para el traslado urgente de enfermos y heridos, y en tareas de apoyo a la población en cuestiones de seguridad y protección civil, sino que ahora están varados por no decir abandonados por falta de servicio y mantenimiento seguros.
Sucesores de Roberto Coppel no dan una Desde la muerte de Roberto Coppe Obregón, en aquel trágico accidente del 24 de diciembre de 2018, en el que también murieron la gobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo y su esposo el senador Rafael Moreno Valle, la Dirección de Servicios Aéreos o de Servicios Logísticos de Apoyo al Ejecutivo (DSLAE) ha tenido dos titulares. El primero fue Iván Valencia Reyes, quien fue jefe de operaciones aéreas en el Estado de México y uno de los pilotos del presidente Enrique Peña Nieto. A éste lo sustituyó por el mes de noviembre del año pasado Luis Enrique Macías, quien llegó procedente de Toluca y con la encomienda de limpiar el hangar oficial. En los hechos la oficina no la maneja Luis Enrique Macías, sino un par de colaboradores o subordinados que están haciendo su agosto con la nómina y los proveedores: el capitán Héctor Tadeo Mejía y su novia Hilda Osorio Morán. Héctor Tadeo se auto asignó la responsabilidad de gestionar la certificación Safety Management System (SMS) ante las autoridades aeronáuticas, por la que cobra 66 mil pesos adicionales a su salario mensual, e Hilda Osorio consiguió salir del régimen de honorarios para ser contratada como empleada de confianza, con lo que sus ingresos mensuales pasaron de 12 mil a 28 mil pesos. Y todo eso mientras las aeronaves del gobierno han dejado de volar por fallas mecánicas en el motor (Bell 407); discrepancias entre el rotor principal y una de las palas del Agusta 109 S bimotor; y por falta de mantenimiento y servicios del Agusta 119.
@periodistasoy
https://m.facebook.com/RodolfoRuizOficial |
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, periodismo con causa. |