Los empresarios no son el enemigo

Es importante entender y recalcar que “el dinero del gobierno” no viene del bolsillo.

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Es importante entender y recalcar que “el dinero del gobierno” no viene del bolsillo de quien dispone de él, no son los gobernantes quienes lo trabajaron, son los particulares que a través de su esfuerzo crean empresas y trabajo. Estas actividades pagan impuestos, y es gracias a este dinero que el gobierno puede actuar e implementar programas sociales. En otras palabras, si nadie trabajara, entonces no habría de dónde el gobierno pudiera recibir este dinero.

En una sociedad tenemos a la maestra del colegio, al carpintero, al plomero, al vendedor de materiales etc. Todos éstos pagan de manera proporcional un porcentaje de sus ingresos en forma de impuesto para que haya dinero para hospitales, alumbrado público, calles, carreteras y toda la infraestructura necesaria para que una ciudad, una entidad federativa, e incluso el país entero funcionen.

El Covid-19 y las estrategias que se han implementado por parte de los gobiernos de muchos países han ejemplificado cómo funciona este ciclo sin fin. El restaurante que tuvo que cerrar sus puertas, dejando a meseros y garroteros desempleados. La tienda que tuvo que despedir a todo el personal. O la papelería que quizás no volverá a abrir después de la pandemia. Todas estas personas dejan de generar dinero, por lo que dejan de pagar impuestos y esto se traduce en menos presupuesto para que el gobierno pueda operar.

Últimamente me he encontrado en redes sociales comentarios negativos sobre empresarios, en donde generalizan a cualquier tipo de empresario como el villano y enemigo de México, cuando en realidad desde los empresarios que tienen dos empleados, hasta los grandes corporativos con representación trasnacional, juegan un rol muy importante para la estabilidad económica del país. Ésta a su vez promueve también una estabilidad social a través de programas y proyectos para brindar servicios a la población.

El empresario no es el enemigo, sino más bien todo lo contrario. Es aquel que arriesga su dinero día a día para hacer crecer y prosperar a su empresa. Mientras más grande sea la empresa, más empleados tendrá, más impuestos pagará y más estabilidad económica, política y social se respirará en nuestro país.

 

* Integrante del Departamento de Derecho

Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno

Tecnológico de Monterrey-Puebla

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Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, diario imparcial de Puebla.


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