Las meretrices del poder en Puebla

  • URL copiada al portapapeles

Puebla se enfila hacia la carga de artillería para definir candidaturas donde se renovarán Presidencias Municipales y Congreso del Estado, con miras a garantizar el control de parte del máximo elector (el Gobernador Miguel Barbosa) para blindarse en lo que resta del sexenio.

 

En los últimos meses, hemos sido testigos de un show de bajo presupuesto, donde las llamadas figuras de la política poblana, actúan como meretrices del poder, las marcas políticas, las alianzas electorales y los pactos de bajo nivel que nos pronostican unas elecciones intermedias donde de manera vergonzosa se reitera una y otra vez, que el Gobernador llevará mano para la elección de candidaturas de su partido y de los que no son de su partido.

 

Tal parece que el odiado Rafael Moreno Valle sentó las bases para replicar el modus operandi de lo que tanto le criticaron y hoy imitan a la perfección.

Disminuir a los opositores a través de amenazas o persecución ya es una forma de continuidad en Puebla.

 

Tender las redes para cachar el voto de los partidos satélite e ir más allá, hasta lograr la pulverización de los sufragios, es una medida que se aplicará por default en los comicios de 2021, donde el pronóstico anuncia una elección de Estado en Puebla.

 

Resulta caricaturesco ver la burda estrategia de un delfín que nada de muertito pagando medios y columnas como su fina estrategia para darse conocer en una ciudad que ignora quién es y donde nació.

 

Resulta cómico escuchar a los políticos no sólo del partido que hoy gobierna en Puebla, sino también a los de la desdibujada oposición o incluso a los esquiroles que al estilo arlequín le hacen al show para ser los distractores temporales, como en el caso de Eduardo Rivera Santamaría.

 

Las encuestas corren a diario en las mesas de la política poblana. Incluso en los cuartos de guerra se mide todo sin medir nada, sólo humo, aire, las cifras infladas y pagadas a modo para que los personajes en cuestión realmente se la crean y dejen de ver una realidad tajante: El hartazgo de la ciudadanía hacia marcas gobernantes, oposición debilitada y esquiroles prefabricados.

 

Muchos se amparan en el débil argumento de estoy y me veo en todos lados, cuando eso no es una estrategia infalible para ser rechazados en las urnas.

El delfín prosaico y arcaico se siente en caballo de hacienda cuando el grueso de la gente en Puebla no sabe ni de dónde salió.

 

Algunos agoreros de las desgracias morenistas ya fueron exiliados.

 

Pero ahí están los otros, los mercaderes de aspiraciones que rayan en la desfachatez como en el caso del “reconvertido” y purificado Marcelo García Almaguer que hoy se siente como pastorcito de la clase media, cuando fue uno de los alfiles del grupo que devastó a Puebla en épocas morenovallistas.

 

Y qué decir del resto de meretrices al servicio del poder que están para lo que se ofrezca en Casa Aguayo.

 

Ahí en fila india pasan desde Rafael Moreno Valle Buitrón hasta el inefable Gerardo Islas, besando la mano del gran elector.

 

Del otro lado, están los que se dicen oposición que son más bien una verdadera descomposición caótica que no encuentra el punto de cohesión y equilibrio.

 

Muy en su estilo panista, todos contra todos, algunos timoratos y otros más ambiciosos, pero seguimos viendo más de lo mismo. Ni siquiera se cambian discursos o nombres.

 

Ahí están las mismas caras, unas más aburridas que otras, diciéndonos lo mismo, hablando de paz, amor al mundo, ciudades que ya fueron y que necesitamos vuelvan a ser.

 

En tanto, los que hoy gobiernan lo hacen sin reconocer su propio desgaste y confiando en encuestas cuchareadas que son una frágil virtualidad de lo que realmente encontrarán en las urnas el próximo 6 de junio.

 

@rubysoriano

[email protected]

Facebook: Mediatikos Consulting

 

 

  • URL copiada al portapapeles