Crece incorfomidad en el PRD contra Carlos Martínez Amador

¡Qué tal, vecinas y vecinos! Arrancamos con nota que interesa a los hijos del maíz, amantes de los tacos y el totopo: la tortilla podría subir hasta tres pesos; pasaría de 15 pesos a 18 pesos.

Esto hay que tomarlo con pinzas porque ya saben que cuando hacen amagos vienen las negociaciones, y luego que no, que nomás subirá un peso y todos contentos… menos el bolsillo de las familias.

Lo que es un hecho es que todo está subiendo como la espuma, y en el mundo de las tortillerías pues no es la excepción: suben el maíz y el gas, por ejemplo. Esperemos todo quede en una simple amenaza.

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Al interior del PRD poblano existe mucho descontento en contra de su dirigente Carlos Martínez Amador, de quien aseguran “vendió” al partido… pero aún no saben a cambio de qué, porque por primera vez en toda su historia el Sol Azteca no tendrá representación alguna en el Congreso del estado. Martínez Amador -quien ya en la admistración de Rafael Moreno Valle era cuestionado por sus negociaciones por debajo de la mesa- ha pregonado a los cuatro vientos que hará lo que tenga que hacer para reinvindicar a su partido, incluso si su cabeza está de por medio. Con los pésimos resultados en donde el partido apenas y alcanzó la votación para mantener el registro, lo justo sería una renuncia voluntaria, al menos es lo que se escucha con más frecuencia en radio pasillo.

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El culebrón de la UDLAP llegó a su clímax. Ayer, el gobernador de Puebla dijo que el litigio de la Fundación Jenkins se resolverá con sentencias muy duras para los que resulten implicados, porque -según sus dichos- para mover la lana hubo una confabulación por parte de personajes de entes privados, públicos y hombres del poder, por lo que no le sorprende que el proceso al que se somete el patronato y la fundación sacará nombres de gran relevancia e interés político.

Ahora toca esperar porque luego nomás amagan con revelar redes insólitas de maldad y quedan en “ya merito”, como lo que pasó con la presunta venta de niños desde el DIF estatal que prometieron sacar a la luz.

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Luego que volviera a salir el tema del espionaje por parte del gobierno a periodistas vía software Pegassus, ese que aquí en Puebla estaba haciendo de las suyas a través del entambado Eukid Castañón, vale la pena resaltar que el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, acusado de comprar tecnologías de vigilancia, es uña y mugre de Armando Ríos Piter, quien a su vez es gran amigo de Miguel Barbosa.. Esto en política quiere decir todo o quiere decir nada, vecina, vecino saqué usted sus propias conclusiones…

Nos leemos mañana.

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