Creo que todos y todas hemos escuchado la teoría del efecto mariposa, esa que dice que el aleteo de una mariposa en alguna parte, puede causar un huracán en otro lugar lejano. Y con esto se refiere a que una pequeña acción, puede llegar a tener grandes repercusiones.

La mayoría de las ocasiones no estamos conscientes de lo que hacemos o dejamos de hacer. Mucho menos de las consecuencias de esos actos u omisiones. Aún así, una realidad absoluta es que todo lo que hacemos o dejamos de hacer, tiene consecuencias. Desde lo más simple, a lo más complejo. Y claro, del tamaño del acto o de la omisión, será el tamaño de la consecuencia.

Veo como claro ejemplo del efecto mariposa, a aquella persona que tira algo de basura en la calle, y tiene un pensamiento de: "Solo es una basura pequeña, no pasa nada". Pero esa pequeña basura llegó a comentar un bloque de basura grande, que exactamente sirvió para tapar el último espacio de una coladera, que al quedar totalmente tapada por esa pequeña basura que tiro ese hombre provocó una inundación en aquella calle, misma que provocó un gran caos y problemas para quienes ahí vivían.

Y así podría poner muchos ejemplos más, como aquel que anula su voto por poner algo "chistoso" en la boleta. Voto nulo que ayuda a ganar a un mal candidato. Candidato que al ser electo se dedica a robar y ser corrupto.

Creo que en general, cuando pensamos en la teoría del efecto mariposa, tendemos a pensar cosas negativas, mas la realidad es que, no siempre el efecto mariposa tiene porque ser negativa. Puede también, una pequeña acción positiva, terminar en algo verdaderamente grande que ayude a la sociedad.

Imaginemos que hay un niño de escasos recursos que está triste por su difícil situación de vida, y que al momento de su tránsito por la adolescencia, orillado por esa tristeza que ha cargado durante años, toma malas decisiones y elige malos caminos. Qué tal si en algún momento de la infancia triste de ese niño, alguien como… alguien como… alguien como tú que estás leyendo, decide donar un juguete para el día del niño a una fundación; y esa fundación va a esa comunidad donde está ese niño, y ese juguete que tú donaste lo recibe ese niño; y al recibirlo se corta su tristeza, se alegra y se motiva. Y esa motivación hace que cuando transite en la adolescencia tome la decisión de seguir estudiando. Y muchos años después de aquella ocasión que tú diste un juguete con motivo del día del niño a una fundación, ese niño que tú ni siquiera viste, se convierte en un hombre de bien que hace una gran aportación a la sociedad.

Ufff… Que bello sería ese efecto mariposa. Y pues es una teoría, no está comprobada; aún así, sería genial que todos y todas como sociedad fomentemos las pequeñas buenas acciones, quizá algún día, incluso sin que lo lleguemos a saber, una buena acción que realicemos, llega a tener una gran repercusión positiva.

Agradezco a El Popular por el espacio que me brinda para compartir con ustedes sus lectores las Letras de un activista.

Rescoldos.

En Fundación Madai, teremos eventos para festejar el día del niño y la niña a peques en situación vulnerable. Solicitamos apoyo con juguetes y todo lo que pueda sumar. Únete, hagamos ese pequeño aleteo de mariposa que podría terminar en un huracán de cosas buenas para nuestra sociedad, hagamos felices a esos niños y niñas que tanto necesitan. Contáctame, yo te digo cómo.

Rafael Reyes Ruiz

@RafaActivista

[email protected]