Morena y su juego de la democracia

Alquimia de Poder

La vecindad Podcast

Memorias del Crimen

Los poblanos debemos mirar desde ahora el panorama catastrófico que en materia política continuará en la entidad y se agudizará con la proximidad del relevo gubernamental hacia el 2024.

Hace unos días atestiguamos la debacle política del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Morena se encuentra hundida por el enfrentamiento, la corrupción y por todas las prácticas antidemocráticas que su mesías sigue defendiendo sin argumentos y con la descalificación de muchos integrantes de su propio partido, quienes están revelando todas las pifias y mañas de este movimiento que han construido con el único objetivo de defender cotos de poder y que distan mucho de los verdaderos intereses del pueblo.

Es vergonzosa la operación del gobernador Miguel Barbosa quien desde su posición de poder desplegó a sus arietes para defender su desgastado bastión que, desde hace tres años sólo oferta venganzas, persecuciones y enfrentamientos.

Barbosa no ha logrado conectar con la ciudadanía a la que gobierna pues en la entidad la mano del gobernador pesa en lo político, pero no en las obras reales de impacto social.

Así como él, resulta igual de vergonzoso mirar al líder de la bancada morenista en la Cámara Baja, Ignacio Mier quien parece que ahora sólo se dedica a organizar comidas de chiles en nogada para invitar a Puebla a personajes políticos de la vida nacional e intentar evadir todas las nubes negras de presunta corrupción que pesan sobre sus negocios y sociedades construidas a la sazón de intereses particulares consolidados con el privilegio de su cargo político.

Y qué decir de su primo el senador Alejandro Armenta quien desde que militaba en las filas del priismo soñaba con la gubernatura, aspiración que lo ha llevado a cambiarse de playera, amigos, bastiones y lo que le pongan enfrente con, tal de figurar entre los candidateables.

Que desgracia padecemos los poblanos frente a un panorama tan rasero, mediocre y con tantos vicios que desde hoy se palpan en estos tres personajes políticos cuya misión es el poder y no propiamente la representación que les dan sus cargos.

Hoy Morena en Puebla es una tribu invadida por el canibalismo de los grupos que se han dividido para buscar a patadas y mordiscos, arrebatarse el pastel.

Hace unos días el Gobernador Miguel Barbosa en una entrevista concedida al periodista Mario Alberto Mejía dijo que el candidato a la gubernatura lo decidirá el Presidente Andrés Manuel López Obrador, vaya revelación lineal, antidemocrática y de viva señal de los rancios tiempos del poder, donde el “número 1” del país seguirá lanzando su dedo flamígero sobre los ungidos para gobernar una entidad.

Todo lo anterior derrumba los argumentos de una frágil democracia que hoy sostiene al partido político en el gobierno.

Es ya una cruda verdad que las llamadas encuestas en Morena son una desparpajada desfachatez, donde todo se simula en función del personaje que es el elegido por el mandatario presidencial.

Vaya desgracia la que nos espera en Puebla, donde un perredista y dos ex priistas bailan al son de la mayordomía local y nacional, para agradar y disciplinarse a las decisiones presidenciales que no son más que una franca y descarada autocracia de los tiempos de la transformación que corren en Puebla y en el país.

 

@rubysoriano    @alquimiapoder

www.alquimistasdelpoder.com

[email protected]

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, periodismo con causa.