Sangre, sudor y lágrimas

En el marco del 8 de marzo, fecha para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, debe de existir voluntad política para que en el Pleno del Palacio Legislativo de San Lázaro se apruebe la reforma para incluir en el Código Penal Federal los ataques con ácido y sustancias corrosivas para castigar con penas de cárcel a los responsables. 

También, una reforma que es de la mayor relevancia y que urge aprobar, es la Ley Vicaria, con la cual se busca sancionar a los padres que ejercen violencia y buscan hacer daño a las mujeres a través de la sustracción de sus hijos y corromper a las autoridades judiciales para obtener la custodia de los mismos.

Son temas que nos involucran a mujeres y hombres de nuestra sociedad, por lo que seguiré insistiendo para que sean ley y continuemos fortaleciendo el marco normativo, para erradicar todo tipo de violencia en contra de mujeres, niñas y adolescentes. 

De igual forma, el 8M significa reconocer la lucha que realizaron nuestras antecesoras a lo largo de la historia, quienes dieron sangre, sudor y lágrimas y que hoy seguimos dando para librarnos de la opresión que nos mantuvo atadas durante décadas. 

Aunque falta mucho por hacer, reconozco que hay avances importantes. Hoy gozamos de total paridad en el Congreso de la Unión y estamos presentes en espacios de toma de decisiones, no solo en la Cámara de Diputados, sino en todas las áreas de la administración pública y de los tres órdenes de gobierno, desde donde continuaremos transformando al país.      

Las mujeres somos pilares de nuestra sociedad. Somos responsables de que México avance. 

Es un honor para mi encabezar la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados, desde donde llevaremos una serie de actividades durante todo el mes para crear conciencia sobre la importancia de fortalecer los derechos políticos de las mujeres, poner fin a la violencia y garantizar las paridad en todos los ámbitos.

Esta Comisión implica la conquista de nuestros propios derechos, terminar con la violencia que viven las mujeres y legislar para que ni un feminicidio más vuelva a ocurrir. 

Trabajaremos sin descanso hasta lograr un México en donde las mujeres dejen de ser violentadas y se les garanticen todos sus derechos. 

Ser mujer es ser la piedra angular no solo de la familia, sino también de la sociedad; es fuerza, es coraje, para lograr un mejor país.

Cuando nos matan o nos violentan no nos preguntan de qué partido político somos, el feminismo no tiene colores, ni preferencias partidistas. 

Seguiremos luchando, marchando, saliendo a las plazas, a las calles a reclamar justicia, no solo el 8 de Marzo sino todos los días de esta legislatura, porque ese es nuestro trabajo como representantes de las ciudadanas y ciudadanos, nuestro compromiso es firme y sin descanso.

En la Cámara de Diputados legislamos juntas para continuar avanzando hacia una vida libre de violencia, defendiendo la agenda feminista con reformas trascendentales para la vida de las mujeres mexicanas. 

Julieta Kristal Vences Valencia, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados.

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