Benjamín Fernández Pichardo, un luchador incansable de la libertad de expresión

Por donde lo quiera ver, Benjamín Fernández Pichardo es un hombre controversial.

Su espíritu inquieto y combativo, lo llevaron hasta el último día de su carrera periodística a ser incómodo con los gobernantes y políticos en turno.

Fue gracias a su carácter que logró consolidar en Oaxaca la primera y más longeva institución periodística, El Imparcial.

Desde los 18 años tomó las riendas de lo que se convertiría en el periódico más influyente del estado.

Días y noches pasó en la redacción ubicada en la emblemática calle de Armenta y López, edificio en donde con su pasión, dedicación y su gran equipo se imprimieron las mejores páginas que sirvieron para informar y entretener a la sociedad oaxaqueña.

“Quien no ha leído El Imparcial no ha estado en Oaxaca”, es el lema que persiste hasta hoy en día.

De El Imparcial salieron algunos de los periodistas más incisivos de la actualidad, grandes investigadores, diseñadores, caricaturistas y columnistas connotados.

Pero dejemos a un lado el romanticismos y vayamos de lleno a los hechos:

Benjamín es un luchador incansable de la libertad de expresión

Hace 57 años tomó las riendas de El Imparcial de Oaxaca, empresa periodística que surgió para generar contrapesos en un estado dominado por el entonces partido hegemónico

En 1983 fundó y presidió la Asociación Mexicana de Editores (AME), desde donde se generó proyección y mejores condiciones para el gremio a nivel nacional.

Impulsó al Grupo Oaxaca, el cual pujó por la aprobación de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, promulgada por el expresidente Vicente Fox en 2002.

No conforme, en 2010 fundó El Popular de Puebla, que después de 15 años, es uno de los periódicos más críticos del estado.

Su legado siempre estará del lado de la verdad, de la pluralidad del pensamiento y el respeto hacia las y los lectores que han confiado en él.

Por más que uno de los poderes fácticos use deliberadamente y de forma abusiva las herramientas que son del pueblo de Oaxaca para tratar de desprestigiarlo, sus enseñanzas perdurarán en la formación de periodistas éticos y rigurosos, y en las páginas que durante más de 70 años consignaron los hechos más importantes de la historia de Oaxaca.

Su periodismo combativo fue su sello y, por eso, te estamos agradecidos

En vida hermano, en vida

A nombre de mis hermanos y de mi familia, agradecemos al Club Primera Plana y al Club de Periodistas de Antequera por este oportuno y muy merecido homenaje por los 65 años de trayectoria periodística de mi padre.

¡Gracias!

Para ti papá, no tenemos más que admiración y agradecimiento, por tu lucha incansable, por tu carácter indomable y por hacer del periodismo una forma de vida.

¡Felicidades!

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, periodismo con causa.