El momento más importante de Pepe Chedraui y de miles de asistentes
La toma de protesta de Pepe Chedraui reunió a viejas caras de la política, intereses cruzados y promesas que buscan transformar Puebla.
José Chedraui Budib llegó a su toma de protesta como lo que él mismo nombró “el momento más importante de su vida política”. A sus 56 años de edad, el empresario cumplió el sueño de su vida: dirigir los destinos de una de las capitales más importantes del país. En un discurso que duró 25 minutos, Chedraui Budib se mostró sensible, como ningún hombre de la política se lo había permitido: con la voz entrecortada y los ojos vidriosos agradeció a su papá y a su mamá por enseñarle a “trabajar sin descanso y con honestidad”, y a su esposa, María Elise, “por su amor”. Habló de “hacer renacer a Puebla” y de un gobierno transparente y de puertas abiertas; explicó los ejes de su gobierno: Seguridad Pública, Desarrollo Económico, Bienestar para todos, Obras y Servicios, así como Gobierno Moderno. No se contuvo al señalar que le dejaron a Puebla con “serios problemas”, pero tampoco titubeó al agradecer, por lo menos en cuatro ocasiones, al gobernador Sergio Salomón Céspedes por recordarnos quiénes somos: “una gran familia poblana”. Pero no solo fue el momento más importante para Pepe Chedraui y los suyos, sino también para muchos de los 2 mil asistentes que se dieron cita en el Auditorio de la Reforma para presenciar la toma de protesta del nuevo alcalde de Puebla. Políticos, funcionarios, empresarios, rectores, periodistas y uno que otro colado, hicieron todo lo posible por figurar, salvo contadas excepciones. Para muchos ese evento significó un parteaguas en su vida, ya sea un nuevo comienzo o la definición de su destino. Contratos millonarios, librarse del exilio político, esquivar a la Auditoría Superior del Estado, convenios publicitarios y uno que otro huesito que todavía les pudiera caer… por eso era importante estar y ser visto. Si no publicas tu foto, no cuenta, así que algunos hasta fotógrafo particular llevaron como el diputado federal Antonio López Ruiz, quien con todo y su logo, publicó su imagen en redes como si él mismo fuera el protagonista de la escena. Otros hasta porra personal traían, como el recién nombrado regidor Gabriel Biestro Medinilla que de manera poco inusual y nada esporádica lo ovacionaron cuando pronunciaron su nombre. O qué decir del otro regidor José Iván Herrera, ex diputado, ex claudista, ex nachista y ex opositor de Pepe Chedraui, que en vez de respetar el protocolo durante el momento que le tomaron protesta, prefirió saludar al público y hasta levantar el pulgar. Bueno, hasta los que llegaron tarde se aseguraron de ser vistos, como los diputados locales Roberto Zatarain, Grace Palomares y Andrés Villegas, quienes sin el mayor recato entraron saludando, en un gesto de mala educación. Nadie quería pasar desapercibido. Hasta los que se creían muertos revivieron en la nueva escena política, como Luis Banck, Osorio Chong, Ricardo Henaine y David Aysa. Y los que se suponían muertos políticamente, también asistieron como un acto de reinvindicación o tan solo para observar el inicio de su retiro, como los exalcaldes panistas Eduardo Rivera y Adán Domínguez. No se podría dejar de hablar del millón 600 habitantes que tiene la capital poblana, que aunque no fueron invitados, también era un evento importante para ellos. Muchos depositaron sus esperanzas en el gobierno de Morena, para que termine de una vez por todas con la inseguridad, el comercio informal y el mal estado de las vialidades que les dejó la administración panista. Solo que para ellos no hubo luces, ni fotos ni protagonismos; tan solo un espasmo de esperanza para ver si la oportunidad de Pepe Chedraui rinde frutos o nuevamente trasciende en una gran derrota para Puebla. +++ *Mujer, madre y periodista incluida en la lista de 100 Mujeres Líderes del periódico El Universal, máster en Periodismo por la Complutense de Madrid y licenciada en Comunicación por el ITESM. Actualmente, y hasta que el cuerpo aguante, directora de elpopular.mx |
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