¿Qué podemos esperar de Trump?
Actualmente los países deben estar asociados para lograr objetivos comunes
Por Vicente Avendaño Vivimos tiempos complejos y existe una incertidumbre acerca de lo que pasará con nuestro país respecto a la elección presidencial de los Estados Unidos. Donald Trump es un hombre que despierta muchas opiniones en diversos sentidos, lo cierto es que un empresario exitoso, con una gran personalidad que indudablemente llama la atención, también hay que señalar que su vida seguramente es deseable para millones de personas que lo ven con enorme admiración. Sobra decir que la relación con nuestro vecino del norte es fundamental y totalmente necesaria para nuestra economía nacional, el 80% de nuestras exportaciones van para allá y nuestra área de libre comercio tiene dimensiones colosales. También hay que entender que actualmente los países deben estar asociados para lograr objetivos comunes, en el entendido que la soberanía ha dejado de ser ese concepto romántico para dar lugar a los parámetros de colaboración internacional, más en un mundo globalizado donde es muy difícil que haya países que solo miren a su interior. También resulta estéril estar acordándose de la guerra de 1847, en el entendido de que debemos fijarnos en circunstancias actuales, tan solo hay que ver el ejemplo de Francia y Reino Unido, países que se odiaron y pelearon por siglos, pero que al inicio del siglo pasado se unieron para luchar por objetivos comunes y lograron una alianza que superó dos guerras mundiales y sigue vigente hasta el día de hoy. Creo que tomar partido sobre el presidente electo, respecto a que será malo o bueno para nuestro México, es algo impreciso, recordemos que, ante todo, los mandatarios norteamericanos verán por el beneficio de su nación, lo cual evidentemente puede incidir en nuestro país, recordando que “cuando a EU le da gripe, a nosotros nos da pulmonía”, como dice una frase acuñada desde hace años. Pensar que los miembros del partido demócrata son más amigables con México también no es algo certero, recordemos el número de deportados durante el mandato de Barak Obama, lo cual demuestra que no importa el partido político cuando se trata de cuestiones migratorias. La amenaza de deportaciones masivas sí es algo preocupante, sería imposible crear las fuentes de empleo necesarias para los millones de connacionales que serían devueltos a su lugar de origen, pero no podemos negar que los norteamericanos tienen derecho a cerrar sus fronteras, así como México también tiene la prerrogativa de cerrar la frontera sur. Me llama la atención la opinión de algunos migrantes legales que votaron por el republicano, quienes señalan que ellos ya llegaron y que no hay lugar para más. La posible intervención militar de los US Marines en contra de los cárteles también es un tema delicado, lo cierto es que hay muchos lugares en nuestro país donde existe un innegable estado fallido, lo cual es producto de años de corrupción y dominio del crimen organizado, problema que debe ser prioritario para nuestro gobierno de la República, esperando que el problema pueda ser reducido de manera importante. Personalmente, espero que Donald Trump tenga éxito en su encargo y que haya mucho diálogo y cooperación con la presidenta Sheinbaum, en el marco de la legalidad y el respeto a las instituciones, elementos que todo país necesita para lograr la paz y el orden, para así lograr que haya oportunidades para todos los que quieran superarse y así empezar a resolver los grandes problemas estructurales de nuestro país que hoy lucen casi insolucionables.
|
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, periodismo con causa. |