Vecinas, vecinos, dicen que en el Partido del Trabajo no amanecieron muy contentos que digamos, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación les propinó un tremendo golpe al avalar la reforma electoral aprobada en el Congreso del Estado, con la que se puso fin a la figura del “gran perdedor”.

En ese partido político esperaban que el proyecto de la ministra Margarita Ríos Farjat les otorgara la razón y tuvieran a la mano la opción de que, en el 2021, ese mecanismo de acceso al Legislativo les otorgara un diputado. Pero sucedió al revés y ahora, dicen, se truenan los dedos porque no luce tan alentador el panorama electoral para ellos.

Y es que por mucho que vayan en coalición con Morena y con el PVEM, hay quien cree que les darán distritos altamente competidos y con riesgo de derrota.

Ni modo, a prepararse o a temblar...

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Quien de plano inicia con el pie izquierdo es el diputado Rodolfo Huerta Espinosa, con eso de que acusa a los cuatro vientos que es boicoteado por la mayoría morenista, en las sesiones del Congreso del Estado. Se entiende muy bien que, en menor medida, continuará el golpeteo que su jefe emprendió, pero dicen que en el primer día es hasta un despropósito.

Comentan que al menos debió esperar un par de semanas, estudiar el trato, recepción de documentos, relaciones, para entonces emitir una postura con un argumento sólido; pero si de un día para otro ya acusa todo en su contra, pues queda un poco mal.

Y no significa que no le ocurra, solo que resulta muy poco tiempo para comprender que ya hay toda una estrategia para acallarlo…

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Quienes están desesperados son los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial porque el gobierno de Miguel Barbosa Huerta ya anunció que recuperará el predio en Cúmulo de Virgo, ese que Melquiades Morales Flores les entregó en su administración y, después, Rafael Moreno Valle lo ratificó a condición de reducir su extensión.

Pero el actual mandatario considera que este terreno no solo se encuentra abandonado, sino que está en manos de la cúpula empresarial sin justificación real, así que ya hay procedimiento jurídico en marcha para que vuelva a manos del Estado.

No obstante, Ignacio Alarcón Rodríguez Pacheco, el líder del Consejo, levantó la mano para pedir cita... que espere sentado, o mejor, que vayan sacando sus chivas del terreno.

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Ya será ley en Puebla que quien provoque un accidente y conduzca en estado de ebriedad será sancionado con 15 años sin licencia de conducir, luego de que los diputados locales aprobaron una reforma de ley.

No estaría nada mal que a esto se le añadan otras acciones como la aplicación de un auténtico examen de conducir por parte de la Secretaría de Movilidad y Transportes en donde entregan las credenciales como si fueran tarjetas de felicitaciones...

Vecinas, vecinos, nos leemos mañana.