Vecinas, vecinos, vaya que empieza a encenderse el ambiente político, ahora que ya sabemos de las primeras impugnaciones por las reglas para la reelección que estipula el Instituto Electoral del Estado. Cuentan que los dos primeros recursos surgieron de la Sindicatura Municipal, específicamente de su titular, Gonzalo Castillo Pérez; y la segunda, de parte del diputado local del PAN, Oswaldo Jiménez López.

Obviamente son directos interesados en el caso porque el legislador quiere repetir en su curul, ya que eso de competir por la presidencia municipal de Puebla es más rollo que verdad, y en el segundo, porque la jefa del síndico, la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco, quiere competir por mantenerse para un segundo mandato.

De estas impugnaciones y otras más que se sumen, si así sucediera, dependerá principalmente el plazo para que los actuales legisladores y alcaldes se separen de sus puestos, actualmente estipulado en 120 días antes de la jornada electoral.

Ya veremos qué dice el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que tendrá algo así como un mes, porque en la primera semana de febrero tendrían que pedir licencia para embarcarse en la ruta de la reelección.

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Y ya que hablamos de elecciones, cuentan que la diputada local del extinto Partido Encuentro Social, Nora Merino Escamilla, será la próxima presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, en sustitución del morenista, Gabriel Biestro Medinilla.

Ya que el actual líder legislativo se va en busca de la candidatura a la presidencia municipal de Puebla, ya hay un preacuerdo para que la legisladora se quede a cargo, como nueva interlocutora de este Poder ante el gobierno de Miguel Barbosa Huerta.

Es una mujer inteligente, de la confianza de Biestro y, por supuesto, del inquilino de Casa Aguayo. Cuestión de semanas.

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El secretario de Salud, José Antonio Martínez García, informó que una vez que en Puebla comience la vacunación contra Covid-19, irán primero los médicos enfrentan al coronavirus, luego mayores de 60 años, maestros y pacientes con comorbilidades...

No faltó quien puso el grito porque el funcionario incluyó a los docentes, lo que, a decir verdad, no suena disparatado. En todo caso, hay que decirlo, muchos profesores si no son mayores de 60, padecen hipertensión, obesidad o diabetes, y más importante, tratarán con miles de alumnos, menores de edad que de momento no son parte de los grupos a inmunizar.

Así que no se alteren, es buena idea.

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Y ya que es día de Reyes Magos, esperamos que el regalo más importante en sus hogares sea la salud...

Vecinas, vecinos, nos leemos mañana.