La recompensa de Ignacio Mier en Puebla

Vecinas, vecinos, ayer estuvo en la ciudad el ex presidente, Felipe Calderón Hinojosa y esto desató el debate sobre los pros y contras para la campaña del candidato a la presidencia municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez. Los panistas, dicen, quedaron fascinados y los morenistas molestos por esa presencia, así que, en términos reales, no mueve en nada el tablero de las preferencias electorales.

Es muy importante entender que esas figuras nacionales generan percepción para las candidaturas, pero al final no votan, así que, quienes andan en campaña, siganle con sus propuestas porque ni Calderón ni Monreal, ni nadie más, les va a dar el triunfo a ninguno de los equipos en competencia...

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Pasa lo mismo con aquellos que en Morena y PT decidieron incorporar la imagen del presidente Andrés Manuel López obrador, de forma velada, para allegarse de adeptos que el 6 de junio acudan a las urnas. El problema es que, en este caso, pasó lo mismo que en el de Felipe Calderón.

En ese sentido ya hay definiciones. La marca Morena-López Obrador ya garantiza un piso de votación que, en algunos, les alcanzará para ganar; en otros, no es suficiente por el desgaste de gobiernos estatales y municipales. Aunque si ocupan lo que resta de campaña para impulsar una agenda de calidad, ahí pueden encontrar diferencia.

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Ayer el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, el poblano Ignacio Mier Velazco, hizo la parte que le correspondía para advertir que es legal y legítima la orden de aprehensión en contra del gobernador panista de Tamaulipas, Francisco Cabeza de Vaca.

Primero, semanas atrás, organizó el juicio de desafuero y lo consiguió. Ahora, muy activo en redes sociales, otorgó su espaldarazo -que en política resulta ser significativo- a la acción de un juzgado que concedió la orden contra el mandatario. Con eso, afirman, se ganó su reelección y el derecho de imponer a sus hijos en la lista que quiera, según la perspectiva de Andrés Manuel López Obrador.

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Dicen que en Pahuatlán una riña que comenzó por diferencias políticas terminó en el asesinato de tres personas, lo que, en el contexto de la campaña, resulta muy grave.

Vamos a ver qué explican las autoridades tanto de los gobiernos estatal y de aquel municipio como electorales, porque sin duda, marca un punto de quiebre si se quiere llegar a una jornada de votación en paz.

Vecinas, vecinos, nos leemos mañana.