Vecinas,
vecinos, ya es un día más, o un día menos, según lo queramos ver, lo cierto es
que a ratos parece que este bicho del COVID-19 está domesticado y otras veces
parece que nos tiene comiendo de su mano. Por eso, y aunque parezca disco
rayado: ¡cuídense!
Con uno que se contagie hay riesgo de que nueve más se enfermen.
Por si fuera poco, según los reportes de la Secretaría de Salud Federal -que
dicen ser los que saben cómo está el asunto- en México se han aplicado 54
millones 542 mil 551 vacunas desde que comenzó la jornada de vacunación en el
mes de diciembre del 2020.
Pero Puebla, nuestra vecindad chula y bonita, pertenece al grupo de los estados
con mayor rezago, pues apenas lleva 23 por ciento de su población total.
Y todavía hay quien cree que no hay que vacunarse porque nos ponen un chip. ¡Ya
ni la muelan!
*
Los destacados miembros de Morena siguen haciendo de las suyas disparándose al
pie solitos. Es bien sabido, porque para nadie es una sorpresa, que estos
cuates tienen poco –si no es que nulo- interés por los temas de comunicación.
Al partido, que antes era un movimiento y que ahora es poder, nomás no le gira
la piedra en temas de cómo dar a conocer su plataforma, sus intenciones, sus
campañas o lo que sea, siguen amparados en la imagen de Andrés Manuel López
Obrador para que les resuelva todo lo que tenga que ver con credibilidad. ¡Ah!
Pero eso sí, siguen en su guerra intestina para desprestigiarse a diestra y
siniestra, tropezándose con las cabezas, los brazos, las piernas y los pies de
sus compañeros.
Prueba de lo que aquí se dice es que Paola Aguirre, quien hasta hace unos días
se hacía cargo de difundir lo que se hacía en el partido guinda, pues ya se
fue, le dieron las gracias de una manera escueta y contrataron en su lugar a un
tal Luis David García, quien se quedó a la mala en su lugar.
Ojalá los de Morena tengan bien presente que Paola es una profesional, y
gracias a su trayectoria logró hacer acuerdos sin un peso para el partido del
presidente.
¡Ay Morena!
*
Mientras en Puebla los diputados se hicieron ojo de hormiga con la ley de
desaparecidos bajo los argumentos más risibles e indignantes que pudieron haber
dado, demostrando única y exclusivamente la sumisión del Congreso al Poder
Ejecutivo en turno, el Consejo Nacional Ciudadano del Sistema Nacional de
Búsqueda de Personas y los consejos de seis estados del país exigieron a la muy
chabacana LX Legislatura la discusión y aprobación de la ley, tomando en cuenta
la voluntad de los familiares de desaparecidos.
Ahí la clave: tomando en cuenta a los familiares.
Vecinas, vecinos, nos leemos mañana.
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