Por La Rascona*

¡Vecinos y vecinas! La semana avanza y ya estamos cerca del corte semanal de los primeros días de clase, y con ello las dudas y temores de más de uno, tanto del nivel educativo de los “rezagados” como de los posibles contagios. La cosa no es para menos pues ante la poca certidumbre que otorgan las autoridades sobre el manejo de la pandemia, la cosa está poco menos que cerca de la tranquilidad.

El secretario de Educación, Melitón Lozano, que antier no tenía ni idea de cuántos alumnos habían regresado a clases presenciales, ayer se puso las pilas y sin dar muchos detalles, dijo que el 80% de los alumnos y el 99% de los docentes ya están en las aulas.
Más o menos unos 65 mil maestros fueron los que regresaron, y de esos, más o menos faltan mil por ser vacunados. Y así, entre la hibridez de los sistemas educativos, la presión de las autoridades educativas y el tema económico en las contrataciones avanza el ciclo escolar. ¡Que la fortuna nos agarre confesados!

*
Y en la BUAP las cosas si bien parecen más cantadas que Las Mañanitas para colocar a Lilia Cedillo en la Rectoría, nunca falta quien levante la mano para hacer observaciones sobre el proceso, ya sea señalando irregularidades, acusando lo planchado del tema o nomás por hacer bulla… Históricamente siempre hay comparsas, porque un candidato de unidad en un proceso electoral siempre se ve mal dentro de los procesos democráticos.

El caso es que Paco Vélez, quien busca hacer válido el término de dinastía universitaria, ya de plano descartó competir por la rectoría y, además, denunció que fue postulado sin su consentimiento. ¡Ora!

Hasta esta vecindad llegó el chisme de que en la encuesta salió más que pésimamente mal posicionado, contando con un cuarto menos de intención de voto que Cedillo.
No, si más vale decir aquí corrió que aquí quedo, y con eso cerrar un capítulo más de la intentona por extender la “sangre real” de la Autónoma de Puebla.

*
Donde los cates se van a poner de a peso es en el sector empresarial y todo por la basura. El tema es que la concesión del relleno sanitario vencerá y se debe sí o sí renovar en la siguiente administración, y ahí es donde los empresarios harán hasta maromas, cambiarse el nombre, el origen o los apellidos para obtener el millonario, billonario, trillonario negocio.
Y no es por intrigarles, pero hay quienes piden “favores” para bajar el estándar de calidad para que así nomás les den la concesión.

¿Y el medio ambiente? Bien, gracias. Generar un proyecto sostenible para el manejo de los desechos sólidos les resulta más caro que arriesgar la salud de los poblanos.
¿Será que la administración entrante se aviente el tiro de exigir proyectos que procuren el buen manejo, y no nomás echarle más tierra y químicos a la basura? Ya veremos.

*
Al parecer Blanca Jiménez es la única panista preocupada y animada para competir por la dirigencia estatal del PAN. Mientras los demás siguen preocupados por ver cómo darle a Marcos Castro la candidatura, Blanca se está poniendo las pilas y está trabajando para ser ella quien le dé batalla a Genoveva Huerta, una lucha entre mujeres capaces que podría ponerse más que interesante. 
 
 
Vecinos, vecinas, ya podemos estar en contacto directo y chismear más a gusto. Escríbanme a [email protected]