Por La Rascona*

¡Qué tal, vecinos, vecinas! Ya pasaron algunas horas de la toma de protesta de Eduardo Rivera, quien pasó de ser “electo” a ser presidente constitucional de la ciudad de Puebla. Y ahora que ya anda despachando en el palacio municipal una cosa es segura: la mira está puesta no a “corregir el rumbo” sino “orientarlo” rumbo al 2024, pues para nadie es un secreto que la victoria en las urnas en julio pasado lo fortaleció al interior de su partido, sobre todo por la relación cercana que existe con el mandatario estatal.

¡Ah! Pero no crean que todo es miel sobre hojuelas. ¡No! Esa misma ventaja que tiene con algunos copartidarios es una debilidad para otros. Y es que mientras el recuperó la presencia del grupo ortodoxo del panismio en Puebla, el neopanismo identificado con Genoveva Huerta y otros alfiles del finado Rafael Moreno Valle ve un retroceso en los modos de hacer política.

Lo que es cierto es que aún no sabemos ni podemos medir qué tanta intención tenga el mandatario estatal de consentir el proyecto rumbo al 2024 de Lalo, pues tampoco para nadie es un secreto que su as bajo la manga tiene nombre de mujer: Karina Pérez Popoca.

¿Será que los ponga a pelear? ¿Negociará algo? Las cuentas públicas, como bien se sabe, es un garrote que sirve cuando tiene que servir en el mundo de la polaca. Tampoco podemos dejar de lado lo que haya negociado el inquilino de Casa Aguayo con Ricardo Monreal, quien tiene aspiraciones presidenciales. Saco esto a colación porque el apoyo seguramente no es incondicional, y el mandatario estatal querrá poner a su soldado en la sucesión.

La pregunta es: ¿quién será?

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¡Vaya sorpresa, vecinos! Eduardo Rivera batea a los “destapados” para ser directores de Seguridad en la ciudad, y de Enrique Guevara Montiel a Armando Álvarez Morales ya nomás quedaron como pirotecnia mojada, pues al final fue Consuelo Cruz Galindo quien encabezará Secretaría de Seguridad Ciudadana y Protección Civil. Así que una mujer repite en el encargo, lo cual de entrada merece reconocimiento, pues son puestos que en otros tiempos y en un partido tradicional como el PAN estaban negados para el sexo femenino.

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La pelea intestina que mantienen en Acción Nacional por el envalentonado Yunque, quien quiere todas las canicas luego del triunfo de Lalo en la capital, hace que el “fuego amigo” sea la constante en el proceso blanquiazul por renovar su dirigencia.

Y es que luego del apapacho que le dieron Ana Teresa Aranda y a Augusta Díaz de Rivera en la búsqueda del liderazgo de la panadería, resulta que la Comisión Organizadora Electoral le anda metiendo el pie queriéndole negar la candidatura por un presunto adeudo de cuotas con el partido. Como les he dicho, todo lo que suceda hoy no tiene otra intención que no sea llegar vivo al 2024. Agárrense, porque ¡los juegos del hambre ya comenzaron!

Vecinos, vecinas, nos leemos el lunes, recuerden que ya podemos estar en contacto directo y chismear más a gusto en [email protected]