Auditoría Superior, con licencia para atacar

Por La Rascona*

¡Saludos, ludos, ludos, vecinas y vecinos! Y así con este saludo sonidero, digno de cualquier inicio de batalla en la monumental Arena Puebla es que iniciamos este día. No es por otra cosa pero justo el ambiente de rudos contra técnicos, de piquetes de ojo, costalazos, lances maravillosos desde la tercera cuerda es como se están poniendo las cosas en el estado de Puebla.

Ahora tocó el turno al Congreso, donde sacaron a relucir los espolones como queriendo pelear, o más bien pusieron a calentar el agua para pelar pollos, adormecer ranas y hervir cangrejos.

¿Por qué? Pues nada más y nada menos que dieron luz verde para que -la muy temida por todos- el famoso garrote político de los gobiernos en turno, la Auditoría Superior del Estado, vaya paso a pasito pero seguro por las cabezas de exdiputados, expresidentes municipales y exdirectores de órganos municipales, porque dicen que hicieron las de Houdini y “desparecieron” unos 62 millones 56 mil 4 pesitos.

Pero seguro dirán, como todos unos vecinos chismosos: “¡nombres, nombres!” Ahí les van, y si los conocen váyanles diciendo que se contraten unos buenos abogados y sendos auditores externos.

El que más destaca es el siempre polémico José Juan Espinosa Torres, quien fue alcalde de San Pedro Cholula y a quien se le acusa de esfumar 18 millones de 749 mil pesos. Otra es la expresidenta de Tehuacán, terruño del góber en turno, donde se le señala de un daño por 13 millones 334 mil pesos cuando fue alcaldesa de Tehuacán. Le siguen la exalcaldesa de Xayacatlán de Bravo, Maribel Ramírez Pablo, por un monto de 78 mil 200 pesos.

Y así otro tanto más, como José Isaías Velázquez Reyes de Atzizintla, a quien se le acusa de desviar 546 mil 168.94 pesos. También Gustavo Salomón Lara Torres, de Ajalpan, a quien se le sigue por 520 mil 918.63 en Ajalpan y a Pablo Morales Ugalde de Palmar de Bravo, por 488 mil 065.72.

No cabe duda que los carniceros de ayer son las reses de mañana. Claro es que hay que investigar bien y, en caso de demostrarlo, pues que se apliquen las sanciones correspondientes, y que luego no haya “arreglos” en lo oscurito, como se acostumbra en la clase política.

Sobre ese tema, don Leopoldo, quien sigue esperando que su empresa le deposite el aguinaldo, me dijo: A mí la verdad me interesa que al menos unos de los que nos ha robado termine en el bote. Luego dicen que van a ir por ellos y nada de nada. Y a otros nomás les inventan. Uno no sabe pero la polaca es así. Todos son chivos y todos carniceros. Ora sí que como quien dice: depende del cristal con que se les mira.

Unos andan en camionetotas después de que dejan el puesto, otros dejan a su familia bien acomodada y con negocios ya puestos. Luego hasta los hijos de funcionarios andan metidos en constructoras y les dan obras y puro jale y jale dinero.

¿Y el pueblo? Pues a aguantar. Pero un día nos vamos a cansar y los vamos a mandar derechito a la fregada a todos. No sé cuánto falte para eso, o si me va  a tocar verlo o a mis nietos, pero de que va a pasar, va a pasar. Van a ver.

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Los vecinos se cansan, se quejan y reaccionan. A veces hay votos de castigo o abstenciones. Pero cuando ni en las urnas se resuelven las cosas. ¡Carachos!

Vecinos, vecinas, nos leemos mañana, recuerden que ya podemos estar en contacto directo y chismear más a gusto en [email protected]

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