¡Vecinas y vecinos! ¿Cómo les están cayendo estos calores? Algunos me andan diciendo que hasta parece que al sauna político ya nadie puede bajarle la temperatura porque a algunos personajes de plano parece que las altas temperaturas ya los alcanzaron.

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Ahí tienen ustedes al flamante magistrado Carlos Palafox Galeana, a quien de plano se le sublevaron varios empleados del Poder Judicial pidiéndole mejores condiciones de trabajo porque aseguran que hay quienes laboran 16 horas diarias y perciben, muy a destiempo, quincenas de 2 mil 500 pesos.

¡Pero eso no es todo! Acusan que ni siquiera les ponen a su disposición agua para beber… ¡Y con estos calores! “Pero bien que tienen dinero para contratar gente sin experiencia que sólo se pasea por el Poder Judicial, y que contratan para pagarle el favor a alguien. A esas personas les pagan una millonada y nos lo restriegan en la cara”, nos dijo un vecino muy molesto con la situación. “Además hay compañeros que despidieron desde hace cuatro o tres meses y no les quisieron pagar su liquidación. Les dijeron que con que pusieran en su currículum que trabajaron en el Poder Judicial era suficiente pago”, nos dijo otra vecina que pidió respuestas a sus demandas. ¿La solución? Pues el oliviasalomonista de Carlos Palafox les dio un número de wasap para que les resolviera sus dudas. ¡Qué tal! Un poquito más de tacto y un bastantito de soberbia no le caería nada mal.

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En Puebla se impuso desde hace unos años un estilo de “administrar reputaciones” que nada tiene que ver con el periodismo. Esas formas de calumniar se fueron alimentando hasta convertirse en un monstruo de dimensiones abismales, impulsado por políticos con dudosa trayectoria que empezaron a desembolsar grandes sumas de dinero para obtener protección o para vencer, a la mala, a sus enemigos. El precursor de esa forma de operar ya está en la cárcel, sin embargo, su enfermedad se reproduce como un cáncer y muta sin más en personas habidas de poder, nulos principios y algunos dotes de publirrelacionistas. Una historia de éxito y fracaso, como todos los que han emprendido este método de estafar gente, es la del seudo reportero Gerardo Ruiz Herrera, a quien hace 5 años el conocido influencer de autoconocimiento Roberto Zatarain Leal le tendió la mano y lo contrató para trabajar en el periódico “Ranker” que Zatarain abrió durante el proceso electoral de 2018. Curiosamente fue ahí donde el joven de ambición desmedida conoció al ahora difunto Miguel Barbosa Huerta, a quien supo envolver con su estilo y potencial mercenario. Más adelante, al llegar los primeros convenios, su adicción al dinero se potencializó y no le importó morder la mano de quien lo ayudó cuando nadie daba un peso por él. La cercanía de Roberto Zatarain con la ex presidenta municipal era ya muy conocida, y cuando Claudia Rivera Vivanco le puso un alto a Barbosa Huerta con los perfiles que quería imponer en el gobierno municipal afines a Genaro García Luna, Ruiz Herrera comenzó a publicar notas en contra de Roberto, con calumnias fabricadas y ordenadas por Verónica Vélez Macuil, su nueva mentora. Zatarain Leal al ver trastocada su integridad, su vida personal y hasta a su familia, lo demandó por daño moral. Hoy, al tener todo en contra, el joven quien soñó con cubrir el hueco que quedó como administrador de reputaciones, está apunto de perder la demanda y, con ello, una suma de dinero bastante sustanciosa y la poca credibilidad que aún le queda. Ahora que el reportero caído en desgracia se encuentra sin padrino, y con una Verónica Vélez totalmente aislada y derrotada, pide “tregua” a Roberto, cuando en el camino destrozó reputaciones y terminó con carreras políticas de personas que se negaron entrar a su juego perverso.

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Vaya lío que se armó en Tecamachalco, terruño de la familia Mier, donde el junior es alcalde! Fíjense nomás que con la visita a ese municipio del aspirante a gobernador, primo del fallecido Miguel Barbosa y que en ratos libres funge como secretario de Gobernación, no son pocos los que arquearon las cejas y se vieron los unos a los otros. Y es que a la reunión convocada por el mismo secretario de Gobernación hubo más de uno que se vio sorprendido luego de que sacaran a la prensa del salón donde Julio Huerta Gómez se reunía con empresarios de Tecamachalco. De plano dijo que era momento de “ahuecar el ala” para que los reporteros los dejaran solos. ¿Con qué fin? Algunos vecinos que pudieron escuchar lo que pasó a puertas cerradas nos contaron que se pidió apoyo para crear una policía ciudadana. ¡Qué! ¡Así como leen! Esto, evidentemente, sería un cuerpo al margen de la ley. ¿Será? Nosotros en esta vecindad lo tomamos con pinzas.

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Vecinas, vecinos, nos vemos la próxima semana. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]