¡Vecinos, vecinas! ¿Cómo los tratan estos cambios de clima?

A unos en verdad que ni el frío les quita lo caliente de la cabeza, ¿a poco no?

El mejor ejemplo es lo que estamos viviendo en este proceso electoral, que aunque inició oficialmente hace un par de semanas, llevan más de un año en franca promoción exponiendo, hoy más que nunca, que los intereses perversos de quienes nos quieren gobernar son los que rigen la política.

Son tiempos en donde impera la ley del que no agandalla no batalla, del sálvese quien pueda y donde primero yo, luego yo y al final yo.

Ahí tiene a una Ana Tere Aranda Orozco denunciando a un Nacho Mier Velazco, pero que se olvidó de personajes que también han mostrado un dispendio de recursos como el senador Alejandro Armenta, Olivia Salomón y Julio Huerta, quien se escudó en la coordinación de precampaña de Claudia Sheinbaum Pardo para hacer promoción.

Qué tal los barbosistas tratando de desaparecer del mapa a una Claudia Rivera Vivanco, la mujer más posicionada en Puebla por más encuestas que pague Olivia Salomón Vibaldo. Con negativos o no, el haber sido la presidenta municipal de Puebla le dio una proyección que sólo Lalo Rivera puede superar por estar por segunda vez al frente de la alcaldía.

Rivera Vivanco desde tiempos del gobernador Barbosa, se convirtió en una piedra en el zapato y tal parece que a la aversión hacia ella fue hererada.

Ahí están los Toño López, las Liz Sánchez, las viudas, los profes y los doctores, que por el sólo hecho de ostentar un puesto público ya se sienten capaces de ser presidentes municipales o hasta gobernadores.

La avaricia no tiene límites.

También tenemos a los priistas y a los panistas quienes entre ellos mismos han resultado ser sus peores enemigos. Con guerra sucia, unos operando ya en Morena y otros haciendo hasta lo imposible para quedarse con alguna candidatura, se han olvidado de mujeres fuertes y talentosas que llevan tiempo levantando la manos como Blanca Alcalá, Genoveva Huerta, Lupital Leal, Ana Tere Aranda y hasta la propia Nadia Navarro que en seco fue parada por el líder nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, quien destapó a Lalo Rivera negándole la oportunidad a quienes también estaban haciendo su luchita.

Ya ni hablar de los morenovallistas que se niegan a moriry dan patadas de ahogados intentando recuperar el poderío que alguna vez tuvieron y que quedó comprobado que era su difunto líder moral el que los hacía fuerte.

Tal parece indicar que en política el fin justifica los medios y, también, las formas. La ciudadanía, como siempre, queda en segundo término, pero eso sí, a la hora de pedir el voto todos y todas ellas serán los perfiles más ciudadanos del mundo y prometerán hasta lo inimaginable con tal de ganar.

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Los 41 diputados del Congreso local tienen hasta el 29 de octubre para realizar sus informes de labores legislativas y a menos de dos semanas para que se venza el plazo muy pocos han tenido sus eventos de difusión que son obligatorios por ley y que hasta presupesto asignado tienen para llevarlos a cabo.

Poco se sabe sobre cuándo y dónde se realizarán sus eventos y sobre todo de qué manera gastarán los 170 mil pesos de los que disponen para realizar esta obligación y deber moral que tienen con la ciudadanía.

Algunos y algunas han hecho sus informes en bloque, como ocurrió con el partido del Partido del Trabajo (PT) que lo hizo en el Centro de Convenciones con un deroche de recursos de casi un millón de pesos y mínima afluencia.

En bloque también lo hará el PRI en el Museo San Pedro. Son pocas, como Lupita Leal, que han aprovechado la oportunidad para hacerse promoción y hacernos saber que ella sí trabaja.

¿Qué hacen con ese dinero que tienen para promoción?

¿Y si no se promocionan, entonces dónde quedó su trabajo legislativo?

¿No hay nada que tegan que informarnos como representantes del Puebla?

La duda mata.

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]