¿Qué está pasando en Puebla en cuanto al descontento social?

¡Qué hay, vecinos, vecinas!

La pregunta que ronda en Puebla es la de qué es lo que está pasando en cuanto al descontento social.

Primero lo que pasó en La Resurrección, que por cierto sigue más caliente que sobaco de paradero.

Después está el asunto de Coyomeapan donde los pobladores de la localidad indígena siguen sin recibir justicia luego de que en 2021 durante el siniestro periodo de Miguel Barbosa donde hubo persecuciones políticas y sociales al por mayor, la Policía estatal disparó contra pobladores matando a tres, entre ellos a un niño.

Sí, esa pregunta que incomoda a autoridades e indigna a ciudadanos está ahí, aunque hay quienes se esfuercen por ocultarla:

¿Qué pasa en Puebla?

Y es que ayer mientras habitantes de Coyomeapan protestaban en el Congreso, en el municipio de la Sierra Negra “levantaron” a tres personas y a otro más lo hirieron de bala.

Ahí, la disputa por el poder es cosa añeja y casi siempre ha contado con el aval de las autoridades.

Ahí, una familia ha tenido el poder durante diez años.

Los Celestino, en su momento, fueron apoyados por Miguel Barbosa.

Ahí, hay denuncias públicas en contra del exsecretario de Gobernación, coordinador de campaña de Claudia Sheinbaum Pardo, primo del peor gobernador en la historia moderna de Puebla y fallido aspirante candidato para la gubernatura: Julio Huerta Gómez.

El lío de Coyomeapan anda tan enredado que hasta se ha intentado invisibilizarlo.

Se espera que el actual gobierno de Sergio Salomón Céspedes no les cierre la puerta del diálogo y la justica, pues lo sucedido en la capital con las protestas de la junta auxiliar La Resurrección podría ser el espejo de Coyomeapan.

Tiento, cuidado, diálogo y justicia, es mucho de lo que ha estado haciendo falta desde hace mucho en este vecindario llamado Puebla.

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Vaya quemadota que le dio Karina Romero Alcalá, titular de la secretaría de Igualdad del municipio, al declarar que el regidor Miguel Ángel Mantilla Martínez no ha solicitado reunión con ella para eso de los cursos de nuevas masculinidades y prevención contra la violencia de género que le fueron pedidos cumplir luego de que discriminara a un ciudadano por sus preferencias sexuales, y por haber manoteado a la regidora Elisa Molina Rivera.

“No se ha acercado con nosotros. Le vamos a hacer llegar que tendría que tomar esas capacitaciones, que es lo que nosotros como Secretaría nos comprometemos; así como si la regidora decide hacer la denuncia, también vamos a hacer el acompañamiento, porque no hemos recibido en la secretaría ninguna denuncia”.

Pues algo es algo, al menos esa dependencia que anda más pérdida que aguja en pajar salió a declarar, mientras aún se sigue esperando la disculpa pública.

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Vecinas, vecinos, nos leemos el lunes. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]

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