A su estilo, los dos contendientes demostraron capacidad de movilización

¡Yepa, yepa, yepa!

Luego de tanta contaminación tanto ambiental como política, a Puebla ya le urgía una buena, buena noticia, una “buena nueva” que nos devolviera la poca cordura que nos queda y nos regalara un momento de alegría…

Aunque apenas dure una semana.

Así es, vecinos y vecinas, ¡al fin terminaron estas largas larguísimas campañas electorales!

Y es que algunas campañitas, pese a que duraron unos meses, se sintieron como de uno, dos y hasta tres años.

Otras incluso hasta parecía que tenían más tiempo.

Exitosas unas, aburridas otras, y otras más nacieron muertas.

Atrás quedaron los tiempos de las corcholatas, los tapados y los delfines.

También quedaron en el olvido las promesas, de las cuales ninguna vecina y ningún vecino se acordarán a la hora de votar el domingo 2 de junio.

Eso sí, antes de la calma, la tormenta.

Y antes de otra tormenta, una pequeña calma.

Fíjense que los cierres de campaña reflejaron no solo el ánimo sino el músculo político de cada contendiente a la gubernatura.

Aunque quieran hacernos creer lo contrario con el mal de las encuestitis, ayer se demostró que en la elección hay tiro.

Los cierres demuestran que, a su estilo, los dos contendientes principales tienen capacidad de movilización.

Alejandro Armenta Mier contó con organización y estructura. Según sus números, reunió a 60 mil almas “convencidas”, con todo y tortas y acarreados de todo el estado.

Eduardo Rivera Rivera dijo reunir 38 mil votantes “convencidos”, y aunque en números no se compara con su contrincante, la mera verdad es que la gente que va a votar por él no suele marchar ni asistir a eventos masivos.

Fosfofer… Pues quién sabe, la mera verdad.

No hay de otra. La diferencia en los resultados será la cantidad de gente que salga a votar, con más del 65%, Acción Nacional tiene grandes posibilidades.

Moraleja:

Ahora que ya terminaron las campañas, la lección que nos queda es que a nuestra democracia le falta mucho, pero mucho para entender que las elecciones son solo un escalón para alcanzarla.

La democracia es más que eso.

Es, como lo hemos dicho, transparencia, rendición de cuentas, participación ciudadana, cultura política.

Es, además, un no rotundo a la frase “el fin justifica los medios”.

Ustedes creen que en este proceso, ¿algo de eso se alcanzó?

Conste que es pregunta.

*

Oigan, para nadie es un secreto que Puebla es un foco rojo al ser una entidad donde las y los candidatos a distintos puestos de elección popular fueron agredidos, amenazados o, incluso, asesinados.

Para muestra lo que le pasó al candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de San Andrés Cholula.

El secretario particular de Eduardo Covián Carrizales fue agredido con lo que aparentemente fue un proyectil contra su auto, además de que se le dejó un mensaje donde se le amenazaba de muerte.

En sus redes sociales, Covián condenó el hecho, a todas luces lamentable, y dijo que pedirá protección.

Triste recordatorio de que nuestro estado es un laboratorio de la incertidumbre política rumbo al 2 de junio.

¿Las autoridades estarán listas para el proceso?

Falta poco para saberlo.

*

Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: lavecindad@elpopular.org

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