Los ataques y el robo de paquetería electoral siguen impulsando la sombra de la judicialización en Puebla
Los ataques y el robo de paquetería electoral siguen impulsando la sombra de la judicialización en Puebla
Los ataques y el robo de paquetería electoral siguen impulsando la sombra de la judicialización en Puebla ¡Ay, vecinos y vecinas! Bien les dije que en estos días previos a la elección del domingo todo se iba a enrarecer. Y, no, no me refiero precisamente a que las gallinas pondrán huevos cuadrados, o que los gatos ladrarán y los muertos se levantarán de sus lechos, aunque muchos de ellos verán que saldrán a votar. No, vecinos, no. Este enrarecimiento tiene que ver con el ambiente que acelera las decisiones y que llevan a uno que otro personaje a adoptar medidas desesperadas con tal de subsistir en el cuadrilátero político. Pero no solo eso, sino que también hay eventos que a más de uno les hace arquear las cejas y decir: “¡Ah, jijos!”. Ahí tienen el caso del robo de boletas, un evento desafortunadísimo que primero nos hizo suponer que había una mano negra o un titiritero moviendo los hilos para fraguar un fraude. Pero, no. Resulta que en cuestión de minutos más de dos mil boletas electorales se esfumaron en manos de un sujeto que tuvo la brillante idea de robar un coche, en una colonia que de por sí padece de inseguridad. ¿Y quiénes dieron aviso? Pues vecinos de la zona. Ninguna autoridad tuvo a bien vigilar un cochecito con tan importante paquetería. ¡La-men-ta-ble! * Los ataques y ahora hasta robos de paquetería electoral siguen impulsando la sombra de la judicialización en Puebla. Un hecho que es innegable es que las autoridades no han podido dar respuesta a los picos de violencia política que se han registrado en estos meses. Incluso los voceros se enfrascan en batallas sin sentido alguno en busca de polemizar y no de ayudar a sus candidatos. Triste pero cierto. Y la realidad es que las encuestas siguen sin moverse. Los que decidieron su voto no se van a mover. Convencer a quienes no piensan votar es misión casi imposible dado el bajísimo nivel de la contienda electoral y, por qué no decirlo, su nula identificación con los candidatos. En verdad que estos no han sido los mejores días para la política en Puebla. * La última y nos vamos. ¿Cómo ven que el Refugio Temporal de Atención del Sistema Municipal DIF que sirve para atender a víctimas de violencia que no cuentan con redes de apoyo o están en peligro inminente y requieren de protección urgente se encuentra en remodelación? Hasta ahí, todo bien. Lo malo es que no habilitaron una sede alterna de atención inmediata y así de la nada cerraron sus puertas. “Aguántenme tantito y usted disculpe las molestias… Esperamos reabrir cuando no sea demasiado tarde para usted mujer violentada”, nada más faltó que pusieran un mensaje similar a la hora que decidieron dejar en el desamparo a las chicas que sufren algún tipo de violencia y que la única salvación que tienen muchas veces es acudir a un refugio donde puedan salvar sus vidas. ¡No se vale! * Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más |
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