¡Por fin! El reinado de Olga Romero y Agustín Guerrero se acerca a su fin

¡Qué hay, vecinos y vecinas!

Pues si pensábamos que esta semana la íbamos a cerrar de manera tranquila, sin sobresaltos políticos y todo en franca armonía, disfrutando de unos buenos chiles en nogada y de unos molletes poblanos, estábamos muy, pero muy equivocados.

El tema de la adscripción indígena de Néstor Camarillo Medina, que al parecer ya había recibido carpetazo de parte de la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, continúa en los pasillos de la grilla, en la comidilla de ocasión y hasta en la caguama banquetera.

Y es que un grupo de habitantes de Zacapoaxtla, Xochiapulco, Xochitlán de Vicente Suárez, Cuetzalan, Jonotla, Ixtepec, Caxhuacan, Huehuetla y Zautla marcharon para manifestarse contra el casi eterno líder tricolor y contra la determinación de las autoridades electorales de validar su candidatura indígena.

Entre mentadas y gritos de “traidor” pidieron a Néstor, en calidad de presunto maseual, hablar náhuatl.

Las malas lenguas dicen que la marcha, cuyo origen dicen es meramente político-electoral, pone presión, pero no cambiará la determinación, sobre todo porque ya no hay una instancia donde se pueda pedir revisión del dictamen.

Eso sí, se dice que el senador electo tendrá días grises cada que vaya a sus distritos… si es que va.

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Los chismes cachetones están diciendo que se avecina el cambio más que cantado en la dirigencia de Morena.

La laja barbosista que cargan como Pípila en sus espaldas Olga Lucía Romero Garci-Crespo y Agustín Guerrero Castillo está por vencer sus huesitos y tronar su comodidad de grupo.

Ni haciendo la del Pípila, ni arrastrando la piedra de la vergüenza dejan de ser como Sísifo: condenados a subir una montaña con una piedra que siempre regresará a ellos hasta aplastarlos.

Ellos apostaron a alguien más y les salió mal, muy mal la jugada.

A nivel nacional, con la virtual llegada de Luisa María Alcalde Luján a la dirigencia, no se olvida que hicieron el oso al apartar al candidato puntero y a la única mujer competitiva.

Quisieron agarrar fuerza al grito de “a lo hecho, pecho”, pero sus horas están contadas.

Algunos dicen que podría haber sorpresas y que alguien de corte morenista tome la dirigencia y que podría provenir de las llamadas bases.

Quizás Rodrigo Abdala Dartigues.

Otros suponen que la lógica se mantendrá y que a la dirigencia llegarán personas afines a Alejandro Armenta.

Quizás Norma Layón Aarun.

Con o sin sorpresa, son muchos los que dicen que la factura llegará tarde o temprano.

Y con retenciones no de IVA ni de ISR, sino kármicas.

¡Cómo ven!

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Vecinas, vecinos, nos leemos el lunes. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: lavecindad@elpopular.org

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