El Verde Ecologista promueve el “tiempo de mujeres”, pero no se atreve a poner a una dirigente o a una coordinadora en el Congreso

¡Ayayay, vecinos y vecinas!

Toca arrancar la semana envueltos en el fervor olímpico y en el absurdo político, donde México, ahí sí, es potencia y siempre se lleva su medalla.

Y es que fíjense que la recomposición de los partidos tras el 2 de junio pasado parece girar en torno al sinsentido.

Mientras el PRI y el PAN se aferran a mantener liderazgos que los llevaron a la debacle, donde ahora unos y otros se responsabilizan diciendo que si no fuera por haber ido en alianza casi casi hasta hubiesen ganado, otros como el Verde Ecologista intenta afianzar su dirigencia y perpetuarse otros añitos más.

Así es. 

Resulta que el famosísimo Jimmy Natale Uranga, líder de los verdes y quien también busca dirigir la bancada del Tucán en el Congreso, anda buscando quedarse otros tres años al frente de la franquicia ecologista en Puebla.

Sus argumentos es que ahora son tercera fuerza política en la entidad y que han ido creciendo. Argumentos ciertos, pero engañosos, pues la estrategia de subirse a la camioneta de Morena es lo que los llevó a esa posición.

“Creo que todavía tenemos mucho por darle al partido, somos la tercera fuerza (política) en el estado, e insisto, la segunda en el Congreso, los números avalan al equipo de trabajo y buscaremos estar al frente un periodo más para llevar el proceso electoral del 2027”, dijo.

El caso es que el Verde, que promueve el famoso “tiempo de mujeres” en la política, no se atreve a poner a una dirigente o a una coordinadora en el Congreso.

¿Qué pasó ahí, amiguitos?

Bien haría el Verde Ecologista de ponerse serio e impulsar ese cambio que forma parte de una realidad y de su propio discurso.

¿No creen?

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Hay quienes se comen las uñas y están deseosos de que se dé a conocer el gabinete de Alejandro Armenta Mier.

Hay quienes anotan a unos y hay quienes se anotan ellos mismos.

Tiempo al tiempo, dicen los cánones; no coman ansias, dicen los panzones.

Una cosa es cierta, y es que en el mapa de organización armentista habrá experiencia y lealtad. También es cierto que se borrará la huella barbosista. Eso sí que se celebra.

Esperemos que las decisiones que se tomen sean prudentes, precisas y oportunas. 

Puebla lo necesita.

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Estamos a 3 días para que se lleve a cabo la Comida Tradicional del Chile en Nogada 2024 que cada año organiza la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (Canirac).

En esta ocasión se llevará a cabo en la Hacienda San José Actipan y el costo del boleto es de mil quinientos pesos.

En el evento tan esperado participan restaurantes ya tradicionales como el Royalty, Centro Mexicano Libanés, La Cúpula, Café Plaza y Santo Cristo, y otros más modernos, pero con muy buena reputación como Valiente y Terraza Prissa.

Extraña que La Noria y El Restauro, restaurantes imperdibles de la gastronomía poblana, propiedad de la empresaria Olga Méndez Juárez, se hayan quedado fuera.

Por ahí se dice que es por la mala relación que existe con algunos personajes dentro de la Secretaría de Turismo y por la maldita costumbre de favorecer a los cuates y excluir a restaurantes que se han ganado a pulso un lugar en el corazón y el estómago de las y los poblanos.

No hay que olvidar que Méndez Juárez ha sido una piedra en el zapato no sólo de los empresarios, si no de gobiernos en turno, por su voz crítica y por haber levantado la mano para dirigir el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), un organismo que parece más club de Toby.

¿Casualidad?

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]

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