Un impresentable presume haber amarrado la Secretaría de Cultura con doble A

La siempre polémica LXI Legislatura aprobará las cuentas del ejercicio fiscal 2022, donde se verán las observaciones de la Auditoría Superior del Estado (ASE).

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Memorias del Crimen

¡Vecinos y vecinas!

Poco a poco la estrategia de Roxana Luna Porquillo para conseguir la presidencia de San Pedro Cholula empieza a desmoronarse como mazapán.

La única esperanza que tenía la alianza opositora de hacerse de un espacio entre las presidencias de la zona conurbada se esfuma.

Poco a poco, recurso tras recurso, la impugnación de la única perredista que queda en Puebla cae como ficha de dominó.

La Sala Regional del Tribunal Electoral de la Federación tiró abajo una de las impugnaciones.

A Roxana y a su equipo le quedan un par, que esperan resuelva esta vez el Tribunal Electoral del Estado, algo que no solo se ve complejo, sino que se vislumbra imposible.

En esa cancha no juega como local.

Lo que se sabe es que Roxana seguirá buscando judicializar el proceso, echarlo abajo y poner en picota el hasta ahora triunfo de Tonantzin Fernández Díaz.

¿Será posible que lo logre?

¿Ustedes qué piensan?

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Hoy, viernes, se viene el despelote en el Congreso de Puebla.

Las prisas están a todo lo que da y así, sin decir agua va, sesionarán para aprobar la friolera de 327 cuentas públicas.

Así es, la siempre polémica LXI Legislatura aprobará las cuentas del ejercicio fiscal 2022, donde se verán las observaciones de la Auditoría Superior del Estado (ASE).

Es curioso que las cuentas se vayan a aprobar de forma pronta y expedita, sobre todo tras el escándalo heredado por el barbosismo que, por aprobar con línea las cuentas, los diputados “no se dieron cuenta” del boquete financiero que dejó la administración de Miguel Barbosa Huerta.

¡Inocentes, pobres criaturas del Señor!

Y es que, por ejemplo, se sabe que la ASE detectó un probable daño patrimonial por 230.7 millones de pesos en el gobierno de San Andrés Cholula, encabezado por Edmundo Tlatehui Percino.

También que Pedro Tepole Hernández no comprobó 46.4 millones de pesos en Tehuacán.

Vaya responsabilidad tendrá la Legislatura poblana más exprés de la que se tenga memoria.

¿Lo sabrán las y los diputados?

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Ya les había contado de alguien que se le va la vida en posicionarse como la candidata idónea para ser la secretaria de Arte y Cultura del gobierno de Alejandro Armenta Mier.

Pero, no es la única persona a la que le comen las ansias.

Ahí tienen a Pedro Mauro Ramos Vázquez, quien se la pasa diciendo en los pasillos de la Secretaría de Cultura que él será el mero mero.

Entre otras bondades, asegura tener todas las tablas por ser el “Jefe de Cronistas del Estado”, que cuenta con la recomendación del muy desprestigiado Sergio Vergara Berdejo y que se ha posicionado y “amarrado” bien el tema con el equipo de doble A Armenta, a quien ya prometió repartir cargos en cuanto llegue.

Para quien no lo conoce, Pedro Mauro, además de duplicar funciones como jefe de Departamento de Cronistas de la Región en Cultura, es secretario del Consejo de la Crónica del Estado.

El autollamado “porfirista” -por su devoción por el dictador Porfirio Díaz- se dice intocable y se la pasa haciendo promoción personal en sus redes sociales a través de esculturas y placas donde graba su nombre con todo y que fueron pagadas con recursos de la Secretaría de Cultura.

Además, fue trabajador de la Editorial Las Ánimas, la favorita del morenovallismo, y ahí fue encumbrado por el dueño y por Sergio Vergara como miembro de la Academia Nacional de Historia y Geografía filial Puebla y de ahí a la Secretaría de Cultura, desde donde cabildeó para que la empresa de libros fuera beneficiada con contratos millonarios.

¡Ah qué fichita!

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Vecinas, vecinos, nos leemos el lunes.

Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: lavecindad@elpopular.org

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