• Paulina Plascencia fue víctima de negligencia médica; exige justicia por la pérdida de su hijo

 Agencias

MÉXICO, DF.- Paulina Plascencia, nieta de la actriz Carmen Salinas, exige justicia tras la pérdida del bebé que esperaba –fruto de su relación con el bailarín Berch Villuendas–, debido a negligencia médica por parte del personal del hospital donde fue internada.

Carmen Salinas habló con Miguel Ángel Mancera, procurador de justicia del Distrito Federal, quien les recomendó que no permitieran la práctica de la necropsia al bebé, sin embargo, en el hospital se la practicaron sin la autorización de los padres. Villuendas y Licia Suárez, madre de Paulina, presentaron una denuncia ante las autoridades por la falta de atención de los médicos.

El hecho

Paulina llamó a la doctora Laura García Moreno, su ginecóloga, el sábado pasado. Ella le recetaría, vía telefónica, unas ampolletas.

Al ver que los malestares continuaban, Plascencia y su esposo la visitaron y les recomendó trasladarse de inmediato a un hospital sugerido, pese a que la pareja prefería acudir a otro. Sin embargo, García Moreno insistió en su recomendación.

La nieta de Carmen Salinas ingresó a urgencias al hospital, donde la ginecóloga la dejó en manos de una doctora de guardia, quien en lugar de estar atenta, se fue a fumar al estacionamiento de las ambulancias.

Paulina pasó muchas horas sin que la revisaran. Después notó que el aparato que mide los latidos del corazón se detuvo, por lo que ella y Berch Villuendas, en medio de su angustia, comenzaron a pedir auxilio.

Villuendas salió del área de urgencias buscando ayuda, durante media hora en las dos torres del hospital, pero se encontró con guardias de seguridad, quienes le indicaron que de seguir gritando, lo sacarían del inmueble. Más tarde, encontró a la doctora de guardia fumando un cigarrillo.

Posteriormente, un grupo de médicos le realizaron la cesárea a Paulina, aunque los esfuerzos fueron inútiles, pues el bebé, de 35 semanas de gestación, ya estaba sin vida.

Tras el lamentable deceso, Paulina, en medio de su tristeza y dolor, mostró su molestia y coraje cuando dos médicos externos le indicaron: "Si lo hubiéramos sacado, se muere, y si no, también se muere".

La actriz recibió el cuerpo sin vida del bebé en una cajita blanca, el cual fue trasladado al Panteón Español, donde se realizó una ceremonia íntima en la que recibió el bautizo y fue sepultado en la cripta familiar, en compañía de los miembros más cercanos.