La Virgen de Guadalupe, símbolo y eje vertebral
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José Peña dicta conferencia “Interpretación en torno al acontecimiento guadalupano” Texto y foto: Carlos ESPINOZA “El culto a la Virgen de Guadalupe ha rebasado incluso al catolicismo, pese a las deficiencias históricas que puedan existir referente a su origen, la virgen es un símbolo nacional indiscutible y eje vertebral de la nación mexicana” afirmó José Joel Peña Espinoza, Investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en conferencia, en el IMACP, concluyendo las actividades del festejo guadalupano. En entrevista para El Popular, diario imparcial de Puebla, el investigador dijo que el objetivo de la ponencia fue plantear reflexiones en torno al culto guadalupano, desde un punto de vista académico, sin tratar de dilucidar el origen verídico de las apariciones y tomando en cuenta que la polémica en torno al milagro guadalupano seguirá latente. “Al pueblo de México estos debates no le interesan, deberían interesarle, porque la fe sin inteligencia no tiene sentido en mi opinión”, refirió el investigador. Reforzó su opinión afirmando que mientras las entidades religiosas que veneran los mexicanos, sigan siendo efectivas y suficientes para resolver las necesidades materiales de sobrevivencia cotidiana, a la gente no le interesará su validez teológica o histórica. Hizo una observación, en la evolución que la fe guadalupana ha experimentado a lo largo de su historia, señalando que cada día surgen nuevas formas de manifestación y apropiación de la misma por parte de la gente. También puso énfasis en la importancia histórica del símbolo guadalupano en diferentes etapas históricas de nuestro país, como la independencia, la revolución, el surgimiento del liberalismo y las pestes que azotaron a la nación en tiempos coloniales. “Ante la desazón que vivimos en este país actualmente, aunado al hecho de que no creemos en nada y casi en nadie, la devoción a la virgen es y será un motivo de unión y solidaridad, como lo fue en los momentos coyunturales, antes mencionados”. Finalmente, abordó el aspecto psicológico del acontecimiento guadalupano, señalando la fijación de los mexicanos por la madre, la cual ha impulsado indiscutiblemente el culto a la morenita del Tepeyac. Entretexto “Somos un pueblo que Freud bien le hubiera gustado analizar por mucho tiempo, porque en la madre colocamos las esperanzas y las frustraciones, de forma inconsciente, buscamos encontrar en ella, consuelo y solución a nuestros males”. José Joel Peña Espinoza/investigador INAH), en
