Historias de 35 mm

 El videohome y las nuevas vías de distribución  Armando Galicia La idea que se tenía desde que se inventó el cinematógrafo fue la de proyectar imágenes en movimiento a gran escala, de tal manera que dicho espectáculo pareciera lo más real posible. A lo largo de más de un siglo de innovación y creación cinematográfica, una premisa se ha mantenido vigente para los aficionados al séptimo arte; aquella dice que el cine fue inventado para verse en salas cinematográficas. Toda la tecnología ideada para recrear los sueños, ha estado pensada para ser reproducida en grande. Lamentablemente, un aspecto se ha interpuesto entre creadores de cine y la proyección de sus proyectos en salas comerciales. Es obvio que de lo que estoy hablando está representado por un signo que es como una S empalada por dos rayitas verticales. El mundo vive un problema con la distribución, los canales que existen para la exhibición comercial están monopolizados por las grandes producciones de Hollywood; y por grandes me refiero a los presupuestos, no tanto a la calidad. En México, al igual que en otros países, la proporción de películas locales exhibidas en cines, es algo así como 1 de cada 10, si no es que exagero. Esto ha dado a lugar a que tanto creativos del cine como gente que hace su agosto de manera ilegal, inventen otras vías de distribución. El primero que se conoce de estos nuevos canales de distribución es el famoso “VideoHome”, que no es más que una película que fue hecha directamente para formatos de reproducción en casa (Beta,VHS, DVD). Con esta estrategia, los productores se olvidan de tratar con los distribuidores de ligas mayores y aunque su mercado es mucho menor, el resultado deseado se obtiene. Con el uso ya casi universal del Internet, otros canales de distribución han surgido. Son cada vez más los documentales, cortos e incluso largometrajes que son exhibidos a través de portales de almacenamiento de videos como YouTube, a manera de promoción o simplemente por compartir información de manera gratuita. Así como todos los mercados se adaptan a las condiciones predominantes, el mercado de los “VideoHomes” no ha sido la excepción. Y es que al verse amenazados también por el plagio de material registrado, algunos creadores han decidido distribuir sus contenidos a través de redes de piratería, dirigiéndole un guiño al dicho “si no puedes con ellos, úneteles”. El cine fue hecho para verse en salas de cine, pero es agradable saber que existen actualmente distintas maneras de pelear con los magnates de contenidos y que con un poco de ingenio, el trabajo de personas con talento puede llegar a nuestros hogares.
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