Celuloide

La invención de Hugo Cabret ISRAEL LEÓN O’FARRILL La invención de Hugo Cabret (2011) dirigida por Martin Scorsese, ha sido nominada a once categorías de los premios Óscar -entre ellas mejor película, director, dirección de arte, efectos y mejor fotografía- todas igualmente merecidas; que merezca ganarlas todas, bueno, eso es otro asunto. Se trata de una cinta que tiene un trabajo impecable en cuanto a dirección artística, vestuario, sonido y efectos; incluso, aunque nos duela –porque ahí está nominado Lubezki por su excelente trabajo en El árbol de la vida (2011)-, la fotografía es uno de sus mejores atributos. Sin embargo, no estoy seguro si es que debiera merecer los premios por mejor película y mejor dirección. Es de reconocer que se trata de un homenaje más que pertinente a los orígenes del cine de ficción en la figura de Georges Méliès -magistralmente interpretado por Ben Kingsley-, director, mago y efectista emblemático quien con su trabajo, sentó las bases del cine por venir. No obstante, Scorsese parece perderse en el desarrollo de efectos especiales que le permitan dar vida al mundo del cineasta francés, lo que lo distrae de la narración que aparentemente lleva la película: la historia de Hugo, un niño huérfano que a través del trabajo con un complejo artefacto intenta encontrarle un sentido a su vida y rescatar algo de su propio padre. En el proceso, traba amistad con una niña que habrá de ser un soporte interesante en la historia; igualmente una peculiar relación con el dueño de una juguetería al que el niño roba piezas para el artefacto; se suman una serie de atormentados personajes que rodean la existencia del muchacho y que, sean antagonistas o protagonistas, dotan de cuerpo a la historia. El casting no está nada mal aunque destaca la presencia de Chloë Grace Moretz como Isabelle que tiene en su papel en Déjame entrar de 2010, un reto a superar. Desafortunadamente, Scorsese afecta el ritmo de su película de manera irremediable al ignorar a sus personajes, lo que trae como consecuencia que se torne cansina a momentos… ello hace que el público infantil se muestre aburrido ante la cinta… en fin, así y todo, es recomendable, aunque yo dirigiría los premios a mejor película y director hacia otra propuesta más sólida. Comentarios y consultas http://israelleon.wordpress.com/
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