Majestuosos óleos religiosos

  • El MAR, que reabrió sus puertas hace un par de meses, ofrece un recorrido por la historiografía de Puebla, y es el primero en el país que recrea la vida conventual femenina de la Nueva España
 Agencia El Universal Una serie de cinco óleos de grandes dimensiones, que sobrepasan los tres metros de altura, decoran la Sala de Terciopelos del Museo de Arte Religioso (MAR), en nuestra ciudad. Los óleos De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se trata de obras creadas hace más de 200 años por manos indígenas, que representan diversas escenas de la vida de Cristo sobre tela aterciopelada, una técnica poco común dentro de la pintura. Fueron pintados por el indígena oriundo de Cholula, Rafael Morante, las cuales por su originalidad, complejidad de su técnica y su gran formato (3.4 metros de altura y 3.2 de ancho), dan nombre a dicho espacio. El museo, bajo custodia del INAH desde 1940, se alberga en el ex Convento de Santa Mónica, y representa el más importante de arte novohispano del país, al resguardar una de las colecciones más grandes, conformada por objetos de los conventos de las órdenes capuchinas, dominicas y agustinas que se establecieron en Puebla durante la época colonial y hasta finales del siglo XIX. El edificio Destaca por ser de los pocos conjuntos conventuales que han sobrevivido hasta nuestros días —de los 11 que hubo en los siglos XVII y XVIII— en la antigua Puebla de los Ángeles. Explica la fundación del sitio, el origen de Puebla en el siglo XVI, el proceso de evangelización, la creación de conventos femeninos y masculinos en dicha entidad, además de la recreación de la vida cotidiana del convento de Santa Mónica. Los artistas del MAR Pascual Pérez, Juan Villalobos, los hermanos José y Francisco del Castillo, Juan Tinoco, Miguel Cabrera, José Ortiz, Juan Correa, Luis Berrueco o el poblano Miguel Jerónimo de Zendejas, cuyas obras son expuestas en la sala de reciente creación: Pintores. En este punto destaca la obra Nuestra Señora de los Gozos realizada en el siglo XVII. Otros objetos También se exhiben documentos, libros, textiles y ornamentos ceremoniales como casullas, túnicas, estolas y una serie de coronas de profesión de las monjas, manufacturadas entre los siglos XIX y XX, con un alma de hierro que les da la forma de corona imperial o real, adornadas con figuras de cera y flores de tela.
  • URL copiada al portapapeles