El guitarrista poblano Carlos Cervantes reconoce que a pesar de los escasos apoyos a la cultura el artista tiene que trabajar en sus proyectos Vidal Pineda Consciente de la realidad en la que atraviesa la cultura en un país como México, en el que las prioridades presupuestales están enfocadas a otros rubros, el guitarrista poblano Carlos Cervantes sabe que lo importante está en el esmero que se debe tener para alcanzar las metas. En entrevista con esta casa editorial, el joven músico habló de su acercamiento con la música y el camino que espera recorrer en esta carrera de las bellas artes. El Popular (EP).- ¿Cómo fue tu acercamiento a la música flamenca? Carlos Cervantes (CC).- Primero me acerco a la guitarra flamenca porque mi familia tenía discos de flamenco y me encantó, me enamoré desde el primer momento que escuché esa música y desde ahí me planteé el objetivo de ser guitarrista, de aprender bien el flamenco, eso fue como a los 13 años, después termino la preparatoria y decido a estudiar música en la Escuela Pacelli. Ahí estudio guitarra clásica, en ese lapso formamos un grupo de flamenco y comenzamos a tocar al lado de Víctor Cosío y una bailarina que se llama Jaqueline Cueto. Aprendo música con otros maestros como Alberto Jiménez y Alberto Moreno. EP.- Con todos estos conocimientos de géneros de música que van desde el rock, el flamenco y el jazz, ¿hacia dónde quieres ir? CC.- Todos esos conocimientos los trato de llevar hacia la fusión de la música, desde el flamenco, el clásico, el rock, el jazz el blues; cuando compongo o hago alguna obra original trato de plasmar ahí todo eso y lo vivencial. Actualmente tengo una banda que se llama Menfis, es una banda de rock fusión, así le llamo, porque tiene m influencia de muchos géneros, desde ritmos latinos hasta blues, flamenco, rock progresivo, una combinación de todo lo que he pasado en la música, estamos a punto de sacar un disco, lo producimos los miembros de la banda: el vocalista César Gutiérrez, Óscar Camacho en la batería y Omar Sánchez en el bajo, todos ellos con trayectoria larga en la música, es un proyecto muy interesantes. EP.- ¿Sabes qué harás con la música en un país en dónde todavía hay pocos espacios de expresión dedicados a géneros como el jazz o el flamenco? CC.- Desde los 17 años me dedico al flamenco y hay públicos que son un poco menos accesibles y oportunidades menos accesible, pero como sustentamos nuestras carreras no precisamente son nuestros proyectos más primordiales, sustentamos nuestra carrera mediante la docencia, tocar en bares, antros, esa es la gran parte de la vida del músico, lo que se conoce como “el hueso”. Lo que buscamos es abrir un cierto tipo de mercado y público que le pudiera gustar y agradar nuestra música, nuestra aspiración es vivir de lo que nosotros hacemos, y eso es algo difícil, sabemos que le tiramos a algo que es complicado y que lleva mucho tiempo, y eso conlleva mucha perseverancia y paciencia. EP.- ¿Por qué la situación es difícil para los músicos? CC.- Es difícil porque sabemos que en México hay ciertas tendencias culturales que son difíciles de abrir hacia géneros como la fusión o el jazz, pero a pesar de eso siempre va a haber un público, siempre habrá alguien a quien le gustará tu música porque nos enfocamos a otros países y también sabemos que es difícil que tu música salga de tu región pero con las redes sociales se puede lograr EP.- ¿Hay apoyos para jóvenes artistas en Puebla, sobre todo para estudiar? CC.- En cuestión de apoyos creo que hay pocos, más allá de las becas que da el FONCA, que se dan anualmente y a ciertos proyectos, no se dan más. Con esto uno se ve en la necesidad de emigrar porque hay muy buena educación en ciertas regiones de nuestro país, pero en cuestión de poder hacer algo más allá de las tendencias populares puedan brindar, obviamente tenemos que emigrar. |