Coco Chanel, la elegancia del pensamiento libre

La diseñadora francesa rompió esquemas en la moda femenina; su esencia ronda bajo el número 5  Raquel TORIBIO  CHANELSu gusto por el color negro fue bien conocido por el mundo, sus diseños de ropa de mujer rompieron esquemas del concepto de la femineidad en busca de la soltura del cuerpo y, por supuesto, de pensamiento; el negro, símbolo de la elegancia, distinción y estilo, también estuvo presente en los momentos más fatídicos de su vida, en la tragedia y la muerte. Su nombre es autoridad en la moda y un referente en la lucha del feminismo: Gabrielle Bonheur Chanel, mejor conocida como Coco Chanel, la mujer, la diseñadora, la leyenda. “Durante mi infancia sólo ansié ser amada. Todos los días pensaba en cómo quitarme la vida, aunque, en el fondo, ya estaba muerta. Sólo el orgullo me salvó”, fueron las palabras que Coco Chanel pronunció en la cúspide su carrera como diseñadora, pues tras una niñez con infortunios, misma que tiempo después se negaba a reconocer, fue el preámbulo para tener un carácter fuerte, competitivo, aguerrido que la llevó a romper esquemas en la moda femenina. Coco, cansada de vestir de acuerdo a los estándares de finales del siglo19, confeccionó vestidos y sombreros para actrices y damas de sociedad, sus creaciones eran originales, además de desafiantes, pues “la simplicidad es la clave de la verdadera elegancia”, y de esta forma abandonó los vestidos pomposos y de gran telaje y, sobre todo, el corsé, símbolo de atadura, estático, para devolverle la libertad del movimiento a la mujer del siglo 20. Coco, mujer visionaria que supo advertir el cambio de la imagen de la mujer, impuso moda con su corte de cabello, casi al estilo de un muchacho, “cuando una mujer se corta el cabello, es porque ha tomado una decisión final”, advirtió Etienne Balsan, su amante y protector. Esta decisión también la llevó a imponerse como una mujer empresaria, una mujer que amó y se hizo amar, que se supo única, “ha habido muchas duquesas de Westminster, pero Chanel hay una sola”. Coco abrió paso a las mujeres versátiles, rompió el convencionalismo de tener que casarse para hacerse notar en sociedad, nunca contrajo nupcias pero sí compartió amoríos, incluso, desterró los vestidos de novia en sus colecciones, a causa del suicidio de su hermana. Cuando París cayó en manos alemanas, cerró sus tiendas y optó por el exilio durante 15 años, debido a los rumores que la señalaban simpatizante y espía al servicio del Tercer Reich, esto sin demostrarse, pero su regreso a la vida pública en los años 50 fue exitoso, Chanel No. 5 seguía en el aire, “el perfume anuncia la llegada de una mujer y alarga su marcha”, citó. Coco Chanel fue la inventora de un imperio comercial, de un nombre que se convirtió en un juicio de valor estético. “Cuando una mujer envejece, debe vestirse de blanco... El blanco lo borra todo”, el negro que la acompañó por 87 años se transformó en blanco la mañana del 10 de enero de 1971, el día en que murió la mujer, pero nació la leyenda.
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