Resalta Villoro el humor de Jorge Ibargüengoitia

El periodista honró en Puebla al escritor guanajuatense, al que consideró un autor de refinado humor y sarcasmo inteligente

Resalta Villoro el humor de Jorge Ibargüengoitia
Karen ROJAS | Villoro resaltó que la obra del autor de La Ley de Herodes mostraba la dolencia de un país a través de la alegría. Resalta Villoro el humor de Jorge Ibargüengoitia

El humor y sarcasmo elegante del escritor mexicano Jorge Ibargüengoitia fue recordado por el periodista Juan Villoro durante la presentación de la plática "El diablo en el espejo" llevada a cabo la noche del viernes, 19 de noviembre en Profética.

Ibargüengoitia fue recordado por el humor crítico de sus obras a través de los relatos de Villoro.

En la conferencia, Villoro platicó que a Jorge se le olvidaban las cosas que no le gustaban, por ejemplo exponer temas; un día aceptó a pesar de que no tenía de que hablar, así que se le ocurrió exponerse a los rayos del sol para que le llegará una idea y de esta manera tuvo el título. Al final le preguntaron ¿por qué nunca había hablado ni del diablo ni del espejo? Esta fue una de las ocurrencias que caracterizaba a esta figura mexicana de las letras y el humor.

El ganador del premio Herralde de 2004 dijo que Puebla tiene la biblioteca más bonita de México en referencia a la Biblioteca Palafoxiana.

Resaltó que el humor ha tenido un camino curioso en la literatura mexicana, porque es un país con sentido del humor en su vida cotidiana, a diferencia del arte y la cultura, los cuales se toman de forma solemne; destacó que Ibargüengoitia demostró que el sentido del humor no es sólo divertido, sino que es una forma en la que la inteligencia nos hace pensar de otra manera, "el que ve la vida de manera humorística se asocia con esa inteligencia y está haciendo una reflexión sobre el mundo, viendo la realidad de diferente manera", señaló.

Villoro comentó que los críticos consideraban de Ibargüengoitia su divertida lectura pero no su profundidad y recordó que al final de una ponencia de literatura en Zamora, Michoacán, hace 35 años, se reunió con diferentes personalidades que más tarde serían decisivas en la cultura mexicana, donde el tema principal de los intelectuales fueron las anécdotas de Jorge Ibargüengoitia.

"Cómo era posible que ninguno de ellos plasmara por escrito su admiración por el escritor mexicano, me pareció que había un divorcio entre la pasión y el ejercicio de la crítica literaria, un autor del que hablamos con tanto entusiasmo y con el conocimiento de causa como si platicáramos de nuestra propia familia, no se reflexionaba tanto por escrito", platicó.

El cronista y periodista comentó que en 1995 recibió, junto a Víctor Díaz Arciniega, una encomienda, para hacer una edición de crítica sobre dos libros de Ibargüengoitia en un solo volumen de sus obras de teatro El Atentado y su novela Los relámpagos de agosto, ambas sobre la Revolución Mexicana, algo que les costó trabajo, ya que no había información del escritor; en 1996 buscaron por internet y encontraron una nota que les entusiasmó "nuevos estudios sobre Jorge Ibargüengoitia", al entrar la nota decía: "Juan Villoro y Víctor Díaz Arciniega están planeando nuevos estudios", comentó el escritor ante las risas de los asistentes.

Villoro declaró que en la actualidad hay libros sobre el escritor, congresos sobre su trayectoria y publicaciones de su obra en diferentes países, de manera principal en España, donde el escritor madrileño Javier Marías le encargó a Villoro que hiciera una antología de sus crónicas para el periódico Excélsior que se llama Revolución en el Jardín.

"Fue necesario un proceso de entendimiento para ver que el escritor no se estaba burlando de México, sino de lo que estaba mal, la ironía fue un efecto de esclarecimiento lúcido en su lenguaje", expresó.

"Su obra en un país tan dolido como el nuestro, pocas cosas son tan rebeldes y disidentes como sentirse bien, a veces todo conspira para que estemos bien, dispongamos de nuestro humor, alegría, ilusiones y sensualidad, eso es lo que nos da toda la obra de Jorge Ibargüengoitia", concluyó.