Fusiona arte y conocimiento histórico
La charla giró en entorno a la artista Catalina Lozano y Willi Cauts; se lleva a cabo dentro del marco del Simposio Internacional Asincronia
Revelar ciertos conocimientos a través de prácticas artísticas que la misma investigación histórica dentro de la academia no ha revelado, fue uno de los puntos más sobresalientes que se retomaron el pasado lunes 27 de noviembre en la presentación Perspectivas curatoriales. Dentro de esta mesa de análisis, Daniel Garza como moderador; la investigadora y curadora asociada en el Museo Jumex, Catalina Lozano; y el curador de arte contemporáneo Willi Cauts, expusieron varios de los proyectos artísticos en los que trabajan y que fungen como vía de exploración del giro historiográfico del arte contemporáneo. La idea de que la historia del colonialismo y de que la modernidad están inextricablemente unidas y que es a través de ello como se pueden explorar los orígenes del colonialismo europeo en su proceso de colonización interna, es lo que expresa el proyecto Una máquina desea instrucciones como un jardín desea disciplina de Catalina Lozano. Una obra que es continuación de sus exposiciones anteriores como Todo tiene un nombre, El potencial de ser nombrado, o la Tierra de nadie. La presentadora refirió que su obra fue mostrada en varios centros en España y Francia entre 2013 y 2014, una exposición cuyo título está tomado de una obra de Jimmie Durham y que explora la colonización interna en Europa. "Es el proyecto mío que trata de involucrar al arte en la producción de conocimiento histórico como una forma de conocimiento válido para avanzar en ciertos sentidos, y yo creo que hay prácticas que (...) no producen texto, pero que a través del análisis, de la producción de imagen abren caminos para romper esos discursos históricos dominantes", comentó Lozano al respecto de su obra. Para Lozano, lo importante en este proyecto era mostrar tres fenómenos que son resultado del proceso de colonización interna y de estado nación: la reducción de la diversidad, la negación de lo sincrónico, y romper la relación unidireccional del observado y el observador. Por su parte, Willi Cauts presentó su obra titulada El curador como postproductor, la cual explora cómo el curador utiliza la exposición como medio, pero también cómo el curador puede ser alguien que es capaz de seleccionar materiales heterogéneos diversos para articular un dispositivo de exposición, como un postproductor. La obra de Cauts transita entre el trabajo curatorial y el trabajo artístico, que comprende la relación entre una serie de proyectos en torno a una figura o pseudónimo que creó el propio Cauts: "Hippies asquerosos". Explicó que su trabajo está relacionado a cómo el espectador percibe el museo, cómo el ámbito museo-exposición puede transformar la percepción de lo que está afuera. "Mi trabajo (...) tiene que ver con el uso del museo como un dispositivo de transformación de imaginarios, de reorganización de imaginarios que permite cambiar la perspectiva del espectador respecto a lo que sucede dentro del ámbito del museo". "Esta experiencia que está concentrada dentro de este museo, de qué manera altera lo que nosotros percibimos afuera." Con el objetivo de abrir campos de reflexión y crítica dentro de las prácticas artísticas y fomentar la discusión entre especialistas de distintos ámbitos, fue como la Secretaría de Cultura y Turismo del estado de Puebla llevó a cabo el pasado lunes el primer día del Simposio Internacional Asincronía: historia y arte contemporáneo, que busca fomentar la profesionalización de la comunidad estudiantil de Artes Visuales del estado. |