Paco Rubín presenta Haikú, poesía para el bolsillo
Formado diseño y publicidad explora métodos "poco formales" de lucir su obra; el poeta presentó su libro en Restaurantero Anarquista
Autonombrándose "poeta de tiempo completo", el escritor Paco Rubín ha desafiado el medio editorial para producir de manera independiente sus obras, pues aprovecha su formación en diseño y publicidad para explora métodos "poco formales" de presentar la escritura. Una de ellas es la poesía lúdica, a través de la cual, además de mostrar su ingenio, busca que el lector interactúe con sus versos de una forma no convencional. La noche del pasado viernes 15 de diciembre en el Restaurantero Anarquista se llevó a cabo la presentación de su "libro y no" -cómo el mismo lo describe- Haikú, poesía para el bolsillo, porque no es un libro "formal", sino que consta de un juego de tarjetas. El autor piensa que este tipo de micro escrituras o de escrituras cortas o mínimas, da la oportunidad de abrir las puertas al vasto mundo de la poesía. El poeta apuesta por la poesía objetual, que retoma el estilo de poesía breve japonés haikú, pero que además de tener una métrica específica -que consta de tres versos de 5 7 y 5 sílabas-, Rubín ha impregnado un desafío intelectual más, pues presenta diez poemas a través de un juego de tarjetas distinguidas en tres colores que identifican a los tres versos del haiku. El objetivo de las cartas es que permitan al lector interactuar con los versos a modo de producir nuevos poemas mediante la combinación al azar de las cartas. El trabajo de Rubín es una buena forma de adentrarse en el mundo de la poesía, ya que al ser interactiva la hace más accesible. "Me ha gustado que a través del juego los públicos puedan acercarse a la obra literaria", comentó. El autor agradece tanto a quienes han entendido su forma "experimental" de escribir, como a aquellos que no comparten su forma de hacer poesía lúdica.
Además, para el autor no sólo la poesía, sino todas las artes juegan un papel importante en el contexto social actual, sobre todo en el local, ya que ellas fungen como modo de expresión. "Creo que la validez del arte es levantar la voz por los que de alguna manera la tienen callada y manifestar el sentir de una colectividad social". |