Abril Posas combina playlist con sus relatos
La obra de la narradora trabaja el tema de la retentiva; “porque es una cosa que me gusta mucho explorar”
El triunfo de la memoria, librode la narradora Abril Posas,es una combinación de música y literatura. La creadora aseguró en entrevista para El Popular, diario imparcial de Puebla que grandes momentos de su vida tienen ya su propio soundtrack, "me cuesta un poco de trabajo no incluirlos en los textos, la verdad es que al momento de escribir, aunque casi siempre lo hago en silencio, a veces una canción me ayuda a resolver el final, o el ritmo, o incluso el tono". Quien lee estos once relatos mientras escucha la playlist homónima de Abril Posas en Spotify, ingresa a un ambiente donde halla rastros de sunarración e incluso complemento de relatos. ¿Cuando escribiste estos cuentos pasó por tu mente hacerlo desde un principio bajo la temática memoria-recuerdo-olvido, o se dio de manera circunstancial? -Fue un poco de los dos, porque algunos de los cuentos que están ahí se escribieron en diferentes tiempos. Por ejemplo,La soledad de los peces muertos lo había escrito para una antología de Paraíso Perdido que se llama Río entre las piedras: es una colección de 27 cuentos de escritores y escritoras que viven en Guadalajara, que no necesariamente que nacieron aquí, y están ilustrados por 27 artistas. Decidimos incluirlo en El triunfo... porque nos dimos cuenta que tenía un poquito de relación con el juego de la memoria. Otros cuentos como el de Bitácora del olvido, la del fantasma [Una promesa], Eltriunfo de la memoria, sí los escribí pensando en la temática. En Bitácora del olvido sólo sabemos el nombre del Arcelia Méndez, ¿importa más lo que sucede en el relato, y por eso a los demás personajes no les pusiste nombre? -En este caso la intención es representar el cómo se va disminuyendo una historia propia; existe el nombre de la protagonista porque está escrito en un diario que tú te encuentras de la nada y empiezas a hojearlo y estás conociendo la historia tal cual como está: con las hojas revueltas, en desorden, con páginas por ahí perdidas. En realidad no es tanto si importa o no el nombre del personaje; más bien quería poner ahí cómo puede ser posible o cómo sería tratar de recordar las cosas pero olvidando los motivos para buscar una respuesta: esa situación que tesigue carcomiendo en la cabeza y no entiendes por qué. La idea es presentar una suerte de amnesia en el personaje, misma que le empieza a asechar; ella lo único que quiere es tratar de recordar lo que estaba pasando a como dé lugar. Cómo surge un personaje en tu mundo, ¿piensas en la trama y basado en eso moldeas al personaje, o sale primero el personaje y luego la trama? -Siempre ha sido diferente, no tengo como un modelo de escritura específico, no lo repito cada vez. Para el cuento de El triunfo de la memoria, primero pensé en el personaje; estaba recordando las clásicas historias que de pronto nos comparten de alguien con una vida aburrida o monótona y cuando descubre que se va a morir la cambia y se transforma y se convierte en un aventurero, alguien que aprecia los pequeños detalles de la vida de una manera distinta; y me puse a pensar que qué pasaría si al final, de todas maneras, no logra algo diferente en su vida, o por qué no lo haría aunque tuviera voluntad. Entonces ese cuento inicio por un personaje y luego la trama. La música, ¿qué rol jugó al momento de la escritura, y de qué manera está inmiscuida en tu vida diaria? -Es muy importante. Grandes momentos de mi vida tienen ya su propio soundtrack, incluso en las conversaciones siempre hay una referencia a los Simpson o a alguna rola. Me cuesta un poco de trabajo no incluirlos en los textos, la verdad es que al momento de escribir, aunque casi siempre lo hago en silencio,a veces una canción me ayuda a resolver el final, o el ritmo, o incluso el tono: si va a ser melancólico, si va ser anecdóticoo cómo lo voy a hacer. Me gusta mucho cuando es posible poner de epígrafe una canción, porque siento que también le podría ayudar al lector a ponerse en el tono correcto; bueno, es también un homenaje. En el caso del cuento de fantasmas [Una promesa] fue gracias a esa canción de Radio Head [Daydreaming] y a su video que logré contar la historia, hubiera sido demasiado sangrón de mi parte no reconocerlo de alguna manera. ¿Qué llegó primero a tu vida, la música o la literatura,o fue de manera simultánea? -Yo creo que pudo haber sido simultánea. Yo soy la más chica de tres hijos, de niña la música que escuchaba era la que oían mis papás y mis hermanos. Gracias a mis hermanos conocí bandas como The Smiths o The cure o Metallica, DuranDuran; por mis papás conocí a José José, Daniela Romo, RocíoDúrcal,ese tipo de cantantes. Por otra parte, mi mamá fue una gran lectora, siempre hubo libros en mi casa, empecé a leer para quitarme el aburrimiento, no había nada en la casa y le pregunté a mi mamá "¿qué hago?" y durante años me dijo "lee, y si ya leíste este, entonces agarra este otro" siempre estuvieron cerca la música y la literatura gracias a la gente que me rodeaba. ¿Qué escritores y libros influyeron en tu formación como escritora, como cuentista? -Definitivamente no me da pena decirlo, me influyó mucho Cortázar; gracias a sus cuentos me dieron ganas de intentarlo cuando estaba pequeña. Borges, por supuesto, es sin duda el escritor que nunca voy a poder ser, pero que admiro muchísimo; me gusta mucho Julio Ramón Ribeyro, un autor que conocí cuando ya estaba en la universidad, sus relatos me dejaban siempre un sabor muy agridulce porque es muy melancólico; me gustanmucho los cuentos fantásticos de Amparo Dávila; también influyó en mí Carson McCullers, ella tiene una manera de retratar el sur de Estados Unidos con una visión muy cruda, con humor y dolor muy fuerte. Y en el panorama literario de México, ¿Qué escritores te inquietan, y qué lecturas estás haciendo? -A diferencia de lo que otros amigos escritores hacen, y que admiro muchísimo, a mí me cuesta un poquito de trabajo seguir todas las novedades; pero sí voy cayendo en libros de Juan Pablo Villalobos, Antonio Ortuño, Iris García Cuevas, Fernanda Melchor y Cecilia Magaña. |