El Museo Amparo abrió una nueva muestra colectiva con el objetivo de acompañar a los asistentes a ser testigos de la manufactura y evolución técnica de los gobelinos en México, así como para reconocer la función y papel social que tiene en el proceso económico e imaginativo este nuevo medio de expresión para artistas contemporáneos.

Bajo el título Nacido en casa. Devenires y porvenires del oficio de la tapicería Alto Liso en Jalisco, 1968-2018, la exposición trata de una serie de piezas en gran formato que dan cuenta de la historia del Taller Mexicano de Gobelinos y sus cincuenta años de manufactura de tapices.

La tarde del sábado, el investigador Iñaki Herranz; Jaime Ashida, curador de la exposición y actual director del Taller Mexicano de Gobelinos; y Yara Patiño, se encargaron de dar la charla inaugural en el auditorio "Arquitecto Pedro Ramírez Vázquez" del recinto cultural, donde abordaron la historia del surgimiento de la técnica de la tapicería, sus diversas facetas, su llegada a México, así como la creación de los talleres de tejido y su íntima relación con el arte y el mural.

Esta forma de manufactura de tapiz, más cercana a la expresión artística, proveniente de una tradición ancestral, nace en el continente europeo cerca de los años cuarenta del siglo pasado, por el artista francés Jean Lurçat, quien revoluciona la técnica creando piezas con características particulares como la reproducción a gran escala de imágenes complejas, una gran paleta de color y monumentalidad.

Cuando la técnica de Alto Liso llega al país desarrolla sus propias modificaciones y crea un movimiento propio. Erich Coufal y Fritz Riedl fundan en Guadalajara en 1968 el taller Gobelinos Mexicanos, donde empiezan a trabajar con los aprendices Rafael y Ángel Morquecho y Manuel Díaz. Luego Riedl continuaría por su cuenta fundando el Gobelinos Riedl, en el que sigue trabajando con los hermanos Morquecho y Manuel Díaz.

La colección está dividida en dos ejes temáticos: la travesía, el devenir; y la trama, la urdimbre, el porvenir. En ella, las obras textiles dan testimonio de una hibridación entre el oficio, el arte y el diseño; la cual, dadas las dimensiones y posibilidades pictóricas de manufactura, se manifiesta como un nuevo muralismo y una nueva forma de expresión y material de trabajo para el artista contemporáneo.

Las galerías del museo muestran el trabajo de un gran número de artistas, entre ellos Julien Devaux, Mathias Goeritz, Eduardo Sarabia, Karen Kilimnik, Lisa Yuskavage, Juan Soriano, Noelle Mason, Matthew Antezzo, Miguel Castro Leñero, Christian Jankowski, Rafael Morquecho, Rachel Feinstein, Rufino Tamayo, Theo Riedl, Fritz Riedl y Colectivo Bergamota.