Acusan derrumbe de Escudo de Armas por tema personal

"Lo que importa es lo que representa, lo que significa para la mayoría de la gente, y también es un mensaje de que no podemos tolerar ese tipo de acciones", sentencia Rafael Mauro Reyes Sanzio luego de que parte del monumento al Escudo de Armas de Ajalpan quedara destruido por órdenes del alcalde Ignacio Salvador Hernández.

El pasado miércoles, cerca de 300 ciudadanos se mostraron inconformes por los daños que sufrió el monumento, tras el intento del presidente municipal de demolerlo. Sin embargo, fueron los mismos pobladores quienes impidieron la acción.

Sanzio, vía telefónica, que la obra fue derrumbada por asuntos personales del presidente Ignacio Salvador con la administración pasada. Tras los rumores sobre el caso, dijo que lo comprobó personalmente junto con la diputada Inés Parra y dos personas más al entrevistarse (cerca de una semana antes del hecho) con Ignacio Salvador Hernández, alcalde del municipio.

"En palabras del propio presidente, nos dijo: 'Esa porquería la voy a quitar'. Y bueno, se le expresó que estaba mal, pero ahí quedó", dijo.

Mencionó que tuvo que actuar conforme a derecho y en un oficio pidió explicaciones, puntualizó artículos donde demuestra que la obra está protegida por la ley federal, indicó sus derechos como autor y mostró su disposición de dialogar. Dicho documento fue entregado a medio día del pasado miércoles, dijo.

"Se supone que bajo el artículo 8 de la Constitución, como autoridad están obligados a dar una respuesta respetuosa y a través de un oficio. Da la casualidad que, yo entregué el oficio al medio día y a las 19 horas él dio la orden de derribarlo. Entonces, ¿cómo puede uno interpretar eso? Prácticamente fue su respuesta, así de: 'No me importa tu papel, yo soy el presidente', y lo mandó a quitar inmediatamente", agregó.

También lee: Tiran obra al Escudo de Armas en Ajalpan

El autor ha mencionado que la actitud que tomó el alcalde está fuera de lugar y no va acorde a una envestidura de un presidente, y señaló que la forma en que actuó es grave, sobretodo porque, más allá del daño material, es una ofensa tanto personal como autor y ofensa a nivel sociedad, pues lo que está ahí está representa al pueblo.

Indicó que de las reparaciones, en dado caso, él se haría cargo de dirigirlas. "Y les voy a pasar los gastos, porque ya no es como inicialmente fue, una donación personal".