"En la Ley de Cultura de Puebla no existe un apartado que hable específicamente de las prácticas artísticas plásticas más allá de su condición de objeto, y no son prácticas que, como tal, estén definidas. Ello es preocupante y se convierte en un problema latente y real en tanto que hay cerca de seis universidades, tanto de iniciativa privada como del estado, promoviendo el estudio de la disciplina; es decir, produciendo trabajadores del arte, sin que exista siquiera una ley de cultura, una manera en la que se tenga cómo puedan estar protegidos, pensados, ni siquiera definidos".

Así lo expuso, la mañana de este viernes, Alma Cardoso en la mesa de trabajo Prácticas Artísticas y la Disputa por el Espacio Público, como parte del foro El Estado de la Cultura en Puebla: Hacia un Giro Participativo y Comunitario, que organizó la revista Klastos, el colectiva ADA y el Centro de Estudios del Desarrollo Económico y Social de la UAP.

Durante su ponencia titulada Revisión de las Artes Plásticas a partir de la Ley de Cultura en Puebla, Cardoso indicó que la última modificación a la Ley de Cultura de este estado se llevó a cabo el 14 de febrero de 2011, en la que se señala, en su Artículo Primero, las acciones para "Reconocer el derecho de todo habitante de la entidad a la valoración de sus manifestaciones culturales, a la creación, a la participación y al disfrute de la vida cultural". 

En su artículo segundo, están especificados los campos particulares sobre los que acciona, entre ellos las "Artes pláticas: Formas de arte cuyos objetos finales y obras son tangibles" (sic).

"Creo que es revelador la manera en que están definidos (...). Esa es la definición de "artes plásticas" en nuestra Ley de Cultura, entonces creo que es fatal (...). Pensando en cómo podemos relacionarnos con la Institución, lo que es un primer paso, urgente, es exigir una redefinición del concepto de arte".