La organización internacional no gubernamental el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios México , ligada a la ONU gracias a la UNESCO, a través de la presidente, Graciela A. Mota Botello, hizo entrega del Reconocimiento 2019 a La Fundación Casa del Mendrugo por el rescate y restauración del patrimonio de Puebla al mundo entero.

Desde 1990, el espacio que fuera edificado por los sacerdotes jesuitas permaneció abandonado y presentaba un grave deterioro. No fue hasta el 2008 que en el inmueble se iniciara un proyecto de recuperación autorizado y supervisado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ello gracias a José Ramón Lozano Torres y María del Pilar Gómez, quienes adquirieron el inmueble.

La Casa del Mendrugo (nombrado así porque fue construida con las limosnas o mendrugos provenientes de feligreses angelopolitanos) fue propiedad de los jesuitas hasta que fueron expulsados en 1767. Luego pasó a ser propiedad de la Iglesia Católica, formó parte del Colegio del Estado y en la segunda mitad del siglo XIX perteneció a particulares.

Durante el proceso de su restauración, en las inmediaciones del patio de la casona se encontró un entierro relacionado con la cultura olmeca, con piezas de cerámica y osamentas humanas con 3 mil 500 años de antigüedad. Los restos de la mujer hallada en el entierro fueron reconstruidos a partir de su osamenta con técnicas forenses y rebautizados con el nombre de "Chuchita".

Estas piezas, junto con una colección restaurada de cerámica mayólica y talavera antigua de la época de la fundación de la ciudad -recuperada durante la reconstrucción de la casa-, y una colección conformada por cráneos humanos y otros objetos provenientes del estado de Oaxaca, conforman lo que ahora es un museo etnográfico al interior de la casona.

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Ambrosio Guzmán, director del centro regional del Instituto Nacional de Antropología e Historia, indicó que toda esta labor ha sido un ejemplo social para la conservación en general de la ciudad, un sitio que además de su objetivo práctico se ha enriquecido con trabajos de investigación y resguardo de piezas de esta extraordinaria cultura.

El secretario de Cultura y Turismo del estado, Alejandro Cañedo Priesca, mencionó que es motivo de orgullo y alegría ser testigo de la entrega del reconocimiento a este inmueble que fue declarado monumento histórico protegido en el año de 1914, pues ello representa el amor, esfuerzo y dedicación que se ha tenido por el patrimonio tangible; un ejemplo a seguir en cuanto a conservación por el trabajo profundo de arqueología urbana y espacio museográfico.

El presidente de la Fundación Casa del Mendrugo, José Ramón Lozano, agradeció a ICOMOS, al INAH, al equipo interdisciplinario que formaron parte de la restauración, así como a la gente que a la fecha hace que sea un espacio vivo.