Juventud, alcohol y algarabía fueron los ingredientes del Festival Árbol en Llamas, un encuentro de jóvenes artistas organizado por el colectivo Moeru Ki, que careció de organización y seriedad en su segunda edición. Este festival tiene como objetivo difundir el arte de los miembros del colectivo, jóvenes de entre 19 y 24 años de edad, alumnos de distintas carreras de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Sin embargo, supone más un festival estilo rave, cuyo propósito difiere de lo mencionado. Y es que tan sólo al llegar a Casa Tonantzin Koatlikue, las paredes que fueron intervenidas por artistas del colectivo para fines de este encuentro, muestran el talento de estos jóvenes. Para esta edición se imprimieron 350 boletos de 100 pesos, que fueron vendidos en su totalidad. El boleto se vendió al público en general, y con éste, el público tendría acceso a todas las actividades que durarían al menos 12 horas, comenzando desde las 3 de la tarde. Lee: Realizan por primera vez el festival Libre LiebreSe presentaron 18 expositores poblanos, y al menos 23 números, entre los que se encontraron presentaciones de danza, arte circense, rap, cine experimental, entre otros. Todo el ambiente estuvo amenizado por música electrónica. Ángel Benítez, uno de los miembros del colectivo, dijo para El popular, diario imparcial de Puebla que se trata de un colectivo interdisciplinario formado a partir de la necesidad de los miembros por compartir su arte y socializar. "El objetivo del evento es difundir el arte emergente y sobre todo nuestro arte, todos nos conocimos por mera casualidad, socializando y nos dimos cuenta que en el estado y en el país hacen falta espacios para que gente como nosotros pueda exponer, para que podamos bailar y podamos pintar, actuar y jugar con la gente," apuntó. |