Las chalupas, antojito con sabor a Puebla

La cultura gastronómica está lleno de versiones e historias que pueden variar no sólo de estado sino que incluso en el mismo estado

El sonido al freír la manteca y ese olor peculiar que de inmediato nos hace salivar aun antes de estar cerca del puesto de chalupas, ya sean verdes o rojas, con o sin carne, tostadas o suaves, con cebolla o con queso; las chalupas forman parte de la gastronomía poblana.

En realidad la receta es bastante sencilla; se trata de una tortilla pequeña frita en manteca, a la que se le agrega una salsa roja o verde elaborada con chiles, jitomates y/o tomates, carne desmenuzada de cerdo o de pollo y el toque de la cebolla, además de la bendita mano que sazona ese antojito.

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Origen

Existen varias leyendas y creencias que giran en torno a la aparición de las chalupas por primera vez. Algunos apuntan que se trata de una preparación prehispánica que era elaborada como parte de la comida popular de los pueblos ancestrales.

Otra creencia apunta a que a pesar de que algunos platillos que forman parte de la gastronomía tradicional distintiva de Puebla, como los chiles en nogada, fueron creados por monjas; las chalupas poblanas fueron un invento de los frailes:

Se dice que en un momento en que los frailes no sabían qué cocinar, utilizaron restos de pollo que agregaron a la masa de maíz, sin embargo, les pareció un sabor insípido por lo que agregaron salsa y cebolla, creando así las tradicionales chalupas.

Sin embargo, una de las leyendas más populares en Puebla es que las chalupas fueron inventadas en el Barrio de San Francisco por la señora Severina. Esta historia cuenta que por petición de las personas para las que cocinaba, para que la tortilla de las pellizcadas fuera más delgada, a Severina se le ocurrió sustituir el queso por carne y servirlo en las tortillas delgadas que le habían pedido, inventando así uno de los antojitos favoritos de los poblanos.

Significado

La palabra chalupa, ha generado debates entre los lingüistas, pues mientras algunos afirman que se trata de una palabra de origen vasco, proveniente de txalupa; otros dicen que la palabra era utilizada por los habitantes de Tenochtitlán y se trataba de un tipo de vehículo utilizado para transportar alimentos por los canales de agua de la ciudad.

Variaciones

Al interior del estado, como normalmente sucede con cualquier receta, las chalupas han variado en su forma de prepararse, pues en algunos municipios de la Mixteca, las chalupas son elaboradas con la tortilla de tamaño normal y además de la carne, la salsa y la cebolla, se les agrega queso añejo y crema.

Sin embargo, en otros estados la chalupa representa algo totalmente distinto. Caso ejemplo es el del estado de Guerrero, donde las chalupas se preparan desde una masa frita elaborando un tipo de tostada con forma cóncava y se sirven acompañadas de pollo desmenuzado, que previamente fue cocinado con chipotle y papas.

Vox populi

En un sondeo realizado por El Popular, diario imparcial de Puebla, preguntamos a los poblanos que salieron de noche para deleitarse con una orden de chalupas (o más), la razón del gusto por este antojito y si conocían el origen de su preparación.

Las chalupas me gustan porque a pesar de los pocos ingredientes con las que se preparan, guardan en ellas un sabor muy especial Alejandro Amatitla 22 años

Es una cena económica y rica. No sé cómo se inventó, pero se me hace parte de nuestras tradiciones. Angélica Guevara 21 años

Me gustan,creoque la salsa es el secreto de su sabor, eso y que se frían en manteca. Asael Torres 26 años

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