Jamás hubo otra alternativa, escribir es lo que yo quería hacer: Fernanda Melchor
Una de las escritoras mexicanas más reconocidas en la actualidad es Fernanda Melchor
Una de las escritoras mexicanas más reconocidas en la actualidad es Fernanda Melchor (Veracruz, 1982), ya que con la obra Temporada de huracanes (2017) ha ganado diversos premios internacionales — los cuales recibe como un compromiso para seguir creando—. Una de las intenciones de este libro es generar imágenes mentales en el lector que lo introduzcan en las páginas del libro, al punto de poder oler los paisajes tropicales de algún pueblo en donde se practique la brujería. Su formación está relacionada con las letras. Desde un principio ella tenía claro lo que quería hacer, aunque llegar a su meta la llevó por diferentes caminos: “estudié periodismo porque sabía que debía que tener un oficio, ya que muy probablemente escribir historias no iba a ser la manera de vivir. Tuve muchos empleos, porque de algo tenía que comer, mientras trataba de descubrir cómo escribir. Dejé parejas que se interponían con mi ambición de crear. Estoy donde estoy porque jamás hubo otra alternativa; escribir es lo que yo quería hacer”, comentó la escritora. Además de esta novela, Melchor ha escrito Aquí no es Miami (2013) y Falsa liebre (2013). Con Temporada de huracanes, la escritora ganó el Premio Internacional de Literatura 2019 de la Casa de Cultura junto a la traductora alemana Angélica Ammar; y en días recientes se anunció que es una de las finalistas para el premio Booker International 2019 junto a otras dos escritoras latinoamericanas. En entrevista con El Popular, diario imparcial de Puebla, Fernanda Melchor platicó sobre esta obra, su intención de reflejar la realidad a través de la ficción y su postura como mujer escritora ante el paro #UnDíaSinNosotras. Al escribir historias fantásticas con elementos de la realidad. También lee: “Las mujeres debemos unir fuerzas” ¿En algún momento lo que vivimos puede superar a la ficción? La realidad de nuestro país ha superado todas las ficciones; ni siquiera las novelas de narcoliteratura, que exploran la vida de los capos y la mafia, pudieron vaticinar lo que está pasando. Los estragos de la violencia de 20 años a la fecha han marcado a nuestra sociedad, y considero que mis libros se interesan en abordar lo que está pasando en México hoy. Me emociona escribir lo que casi no se escribe: historias de pequeñas violencias que se viven en el aspecto familiar e individual, y que se ven reflejadas en las grandes violencias que parecen fuerzas externas que nos invaden; pero todas tienen sus raíces en las violencias machistas, familiares y las negligencias emocionales de los padres y de otros integrantes de la sociedad. Al tener una formación de periodista y ahora ser novelista. ¿Existe alguna diferencia entre al escribir un género y otro? A la hora de escribir, para mí no hay mucha diferencia entre redactar una crónica o una novela. Cuando uno escribe algo verdadero o inventado, busca la mejor forma de contarlo para que el lector se interese, buscando formas que le pinten imágenes mentales; eso es lo que más me interesa. Creo que una de las pocas diferencias es el compromiso. Cuando cuentas una crónica le dices al lector: esto es lo que pasó y he aquí lo que investigue; es un compromiso moral que uno no puede romper jamás. Cuando uno escribe una ficción, siempre se es sincero al entregarlo al público; uno siempre toma de la realidad para crear sus ficciones, y no creas del vacío, tomas lo que has vivido, lo que has visto, la música que has escuchado y los libros que has leído para crear ficción. Referente a este libro que te ha hecho acreedora a diferentes reconocimientos. ¿El utilizar el oficio de bruja para la protagonista tiene una relación con la situación que viven las mujeres en el país? A mí me gustaba mucho la metáfora de la bruja, porque es la mujer poderosa que les da miedo a los hombres, y quería imaginar cómo sería una bruja hoy en día. La práctica de estas corrientes espiritistas me interesaba ponerlas en perspectiva, con un despliegue del por qué y cómo. A mí lo que me interesaba hablar es como un pueblo, a partir de ciertas interrelaciones permite que un crimen terrible contra una persona se cometa sin ningún castigo. ¿Cuál es tu postura sobre #UnDíaSinNosotras? —Respeto mucho el paro del 9 de marzo. El 8 de marzo es una fecha que debe conmemorarse por todo lo que implica, y no debe ser una fiesta vacía en donde nos pongamos moñitos; lo que se me hace interesante es la toma de conciencia que como sociedad estamos tomando. Hace 5 años era difícil alzar la voz en caso del acoso y misoginia en el salón de clases; ahora la diferencia es que la gente está conociendo sus derechos, y no sólo se trata de hombres contra mujeres, sino de personas que buscan una sociedad mejor. Ahora que te encuentras entre las finalistas del Premio Booker prize 2019. ¿Qué significado tienenpara ti los reconocimientos? —Es siempre un gran honor cuando algo que tú creas, que sale de tu mente, y que requiere mucho tiempo y mucha pasión, es tomado en cuenta; es algo que te satisface porque te hace pensar que tu libro va a llegar a más partes; para mí eso implican esos premios. Cuando se traducen a otros idiomas el editor corre un riesgo, y que se lleve tu libro a otros lugares, me da miedo el saber que muchas personas no saben de la realidad mexicana y me pregunto qué es lo que van a leer, y siempre me interrogó de cómo lo van a leer. El ganar un premio es siempre un voto de confianza, y cuando van acompañados de un estímulo económico, también te permite dedicarte a esto con más ganas y con más tiempo. Todos sabemos que son muy pocos los escritores que viven de su trabajo en México, por los bajos niveles de lectura; y aunque fueran altos, la situación económica de las personas no les permite adquirir libros como en otros países.
Melchor actualmente se encuentra trabajando en distintos proyectos, y que seguramente se estarán posicionando como grandes obras de la literatura mexicana contemporánea. |