¿Conoces Las obras más importantes de Frida Kahlo?
Entre su trabajo resalta el gusto por el arte popular indígena y los autorretratos.
La popular artista celebra hoy su 66 aniversario luctuoso lo que es un buen momento para recordar las obras de este célebre personaje mexicano que se ha popularizado a nivel internacional. La temática en su pintura casi siempre fue inclinada hacia el arte popular mexicano indígena además de que Diego Rivera influyo a Frida en su obra que es alrededor de 200 obras en su mayoría autorretratos. Aunque los artistas más importantes de su época la etiquetaban como Surrealista, la pintora no consideraba así su obra ya que estaba basada en sus propias vivencias marcadas por el accidente del tranvía y su esposo el pintor Diego Rivera. Reconocida como por su espíritu revolucionario, militante del partido comunista mexicano, luchó por los derechos de las mujeres, por lo que en la actualidad es reconocida como un símbolo del feminismo. Las exposiciones Su trabajo fue exhibido en distintos Museos relevantes a nivel mundial y algunos de ellos fueron: Julien Levy Gallery, en Nueva York (1938), Galerie Renou et Colle, en París (1939), Galería de Arte Mexicano de Inés Amor, en Ciudad de México (1940), Galería de Arte Contemporáneo de la Lola Álvarez Bravo, en Polanco, México (1953). Sus 5 obras más representativas El trabajo de Frida es extenso aunque según varios sondeos hay cinco obras que son reconocidas como las más influyentes. Las dos Fridas En este cuadro elaborado en 1939 podemos ver a la pintora con traje de tehuana que representa la herencia mexicana oaxaqueña de su madre. La columna rota Hecha en 1944 representa a la artista después de su operación de la columna vertebral debido a las lesiones que sufrió después del accidente en el tranvía en 1925. Autorretrato con collar de espinas Pintado en 1940, hizo este cuadro para pagar su divorcio con Diego Rivera. La mexicana había pintado anteriormente un autorretrato que quería dar a su amante, el fotógrafo Nickolas Muray. El venado herido El paisaje desolado de la naturaleza muerta es el miedo y desesperación, después de su operación en su espina dorsal en Nueva York en 1946, ya que esperaba que esta cirugía la liberara del severo dolor de espalda. Sin Esperanza En esta obra de 1945 Kahlo escribió detrás: “A mí no me queda ya ni la menor esperanza… Todo se mueve al compás de lo que encierra la panza”. En este año permaneció en reposo completo y tuvo que someterse a una dieta de purés cada dos horas para ganar peso. |