“Inadmisible, separar a niños migrantes"

El alto comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas instó a EU a terminar con la nueva política

“Inadmisible, separar a niños migrantes"
Agencias |  Suman 2 mil alejados de su familia “Inadmisible, separar a niños migrantes"

El Alto Comisionado de Derechos Huma­nos de Naciones Uni­das instó al gobierno de Estados Unidos a terminar con su "inadmisible" política de separar a los niños migran­tes de sus padres en la frontera con México.

"Es inconcebible pensar que un Estado busca disuadir a los padres de emigrar infligiendo tal abuso a los niños, es inadmisi­ble", dijo el comisionado Zeid Ra'ad al Hussein en la apertu­ra de una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra.

Al Hussein instó al gobier­no de Estados Unidos a termi­nar con la nueva política y aña­dió que la medida afectó hasta ahora a casi 2 mil menores en las últimas seis semanas. Autoridades del gobierno de Trump destacaron que la tác­tica es necesaria para asegurar la frontera y sugirieron que la medida servirá para disminuir la inmigración ilegal.

Confirma­ron que son 2 mil niños los que fueron separados de los adultos entre mediados de abril y fina­les de mayo. En Estados Unidos, la medi­da ha levantado duras críticas.

La legisladora Sheila Jackson- Lee acusó en tanto a Trump de "no decir la verdad" cuando asegura que sólo sigue las leyes vigentes. "No hay ninguna ley, no hay ninguna política que le permita apartar a los niños de sus familias", dijo, denunciando "un abuso masivo de menores". Por su parte, la senadora republicana Susan Collins tam­bién tildó la medida de "trauma­tizante para los niños que son víctimas inocentes".

Además, "es contraria a nuestros valores como país", dijo. De igual forma, la exprimera dama Laura Bush criticó lo que se está haciendo. "Vivo en un estado fronterizo. Entiendo la necesidad de reforzar y proteger nuestras fronteras internacio­nales, pero esta política de tole­rancia cero es cruel. Es inmo­ral y rompe mi corazón", ase­guró en un editorial del Wash­ington Post. En tanto, la actual primera dama, Melania Trump, resal­tó la tensión emocional que se vive.

"Necesitamos ser un país que acata todas las leyes", pero que también "gobierna con corazón", dijo su portavoz, Stephanie Grisham. "La seño­ra Trump detesta ver a niños separados de sus familias y espe­ra que ambos partidos puedan finalmente ponerse de acuer­do y lograr una exitosa reforma migratoria".

Expresa CIDH preocupación

En este mismo orden de ideas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se dijo hoy "profundamente preocupada" por la separa­ción en la frontera sur de Esta­dos Unidos, bajo la política de cero tolerancia que instrumen­ta el gobierno del presidente Donald Trump.

La presidenta de la CIDH, Margarette May Macaulay señaló que "la familia es la uni­dad fundamental reconocida en las leyes nacionales y el derecho internacional de los derechos humanos en todos los Estados democráticos, y está legalmente reconocida y protegida". Destacó, además, que la migración irregular no es un delito, y dijo que los gobiernos en general deben tener en cuen­ta el interés superior del niño.

De acuerdo con cifras del Departamento de Seguridad Interna (DHS) estadunidense, durante seis semanas de abril y mayo pasados, mil 995 niños fueron separados de sus padres inmigrantes indocumentados detenidos en la frontera sur, una cifra que ahora se calcula en unos dos mil 300 menores. Por su parte, Luis Ernes­to Vargas Silva, comisionado y relator de la CIDH sobre los Derechos de los Migrantes, dijo que Estados Unidos tienen dere­cho a fijar sus políticas migrato­rias pero sin menoscabo de los derechos humanos. "Las políticas y prácticas de inmigración nunca pueden usarse como mecanismos para causar tratos crueles, inhuma­nos y degradantes, para sepa­rar familias, para atacar a niños y sus familias, o para poner en mayor riesgo las vidas de las personas que necesitan protec­ción", adujo. Añadió que "esto es simplemente inhumano e incomprensible".