El parlamento británico ordenó a través de una enmienda, a la primera ministra, Theresa May volver a negociar el acuerdo Brexit ante la Unión Europea, la salvaguarda irlandesa (también conocida como "Northern Ireland backstop" ó "Tope de Irlanda del norte"), uno de los puntos clave que ha frenado el paso del Brexit, después de que este hubiese rechazado por la mayoría en la Cámara de los Comunes.

La enmienda sobre la salvaguarda irlandesa tuvo 317 votos a favor y 310 votos en contra, con lo que se acepta reemplazar el 'backstop' con acuerdos alternativos (aún sin especificar) con la Unión Europea.

Esta salvaguarda propone que Irlanda del Norte se quede por tiempo indefinido en la unión aduanera del bloque, lo que trae un beneficio a la Unión Europea (UE) en el paso de mercancía.

Los euroescépticos emitieron críticas al respeto, señalando que esto daña la unión de los estados que forman el Reino Unido, y además de verlo como amenaza que la UE aprovechará para imponer una frontera entre las dos irlandas.

Enmiendas

Además, se votaron siete enmiendas más. Cinco de ellas, fueron rechazadas y dos fueron aprobadas, entre ellas la del backstop.

La primera enmienda en discutirse fue emitida por Jeremy Corbyn , del líder laborista, quien propuso eliminar la posibilidad de un Brexit sin acuerdo y que se renegocie el pacto con el bloque de la UE para que Reino Unido tenga un tratado aduanero con Bruselas. Fue rechazada con 327 en contra y 296 a favor.

La segunda propuesta fue la del Partido Nacionalista Escocés, que presentó el proyecto para que se reconozca que la mayor parte de los escoceses votó contra la separación del país de la UE, así como respeto a la población para que no sean expulsados "contra su voluntad", y solicitaba una prórroga para la 'ruptura' entre Reino Unido y el bloque. También fue rechazada con 39 votos a favor y 327 en contra.

La tercera fue por parte del exfiscal Dominic Grieve, que proponía un control total del Parlamento sobre el proceso dl Brexit, fue rechazada con 321 votos en contra y 301 a favor.

La enmienda número cuatro fue por, de la laborista Yvette Copper, la cual fue rechazada con 321 votos en contra y 298 a favor. Esta propuesta buscaba extender hasta por nueve meses la salida del Reino Unido de la Unión Europea, la cual tiene fecha para el 29 de marzo. En esta enmienda también se proponía que no hubiera salida de la UE sin un acuerdo alcanzado.

La quinta enmienda, de la también laborista Rachel Reeves, fue rechazada con 322 votos en contra y 290 a favor. Esta enmienda también buscaba prolongar la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

La sexta enmienda, de la diputada Caroline Spelman, fue aceptada con 318 votos a favor y 310 en contra. Su propuesta acepta rechazar una salida de la UE sin un acuerdo previo. De acuerdo con el diario El País, se trata de una derrota para el gobierno de May, pero es una enmienda que no es legalmente vinculante.

La séptima y última fue la del 'backstop', que urge a May a una renegociación con la Unión Europea.

Con información de El Financiero.