Chile recibió este miércoles un millón de vacunas del
laboratorio chino Sinovac, en momentos
en que el país lucha por acelerar la inoculación y frenar un nuevo pico de la
pandemia, con la capital confinada y los hospitales al borde del colapso
sanitario.
El ministro chileno de Salud, Enrique
Paris, anunció que a partir de la próxima semana empezarán las vacunas a
domicilio y pidió al millón de rezagados que aún tiene el país que acudan a
inocularse por cuestiones de "solidaridad".
Paris dijo también que este jueves ingresarán al país 451 mil nuevas dosis de vacunas Pfizer y el sábado nuevas dosis de
AstraZeneca (204 mil) y Cansino (275 mil 908).
Chile, uno de los países con la tasa de
vacunación más alta del mundo, ha recibido en total 23,7 millones de vacunas,
de las cuales 18,1 son de Sinovac; 4,5 de Pfizer-BioNTech; 300 mil de la china
Cansino; y 693 mil 600 de AstraZeneca, a través del mecanismo Covax impulsado
por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Desde el inicio de la vacunación masiva, a principios de febrero, más de 9,2 de los 19 millones de habitantes
el país han completado su esquema de inoculación, mientras que 11,6 ya
recibieron al menos una dosis, lo que equivale al 77,3 por ciento y 60 por
ciento de la población susceptible de ser vacunada.
Pese al exitoso proceso de vacunación, Chile
no consigue contener la pandemia y las autoridades han puesto en cuarentena
a todo Santiago desde el pasado sábado, así como a decenas de barrios a lo
largo de todo el país.
Se trata de un confinamiento más laxo
que los anteriores, puesto que quienes tengan el carné para vacunados, una
medida implementada recientemente, podrán salir a caminar y hacer compras
esenciales sin restricciones (el resto solo puede salir dos veces por semana).
Con los 4 mil 347 infectados nuevos,
registrados este miércoles, una cifra menor que la de los días anteriores,
y los 57 decesos nuevos, el balance total de la crisis sanitaria asciende a más
de 1,49 millones de casos y 39 mil 176 muertes desde el inicio de la pandemia. |