Tortillería y 174 mil pesos, lo que le ofrecen al pastorcito

La familia de Oswaldo Zamora está muy molesta, por lo que dará una conferencia de prensa el 5 de diciembre en el DF  Julio MARTÍNEZ RIVERA PETLALCINGO.- COMO “indemnización” las autoridades pretenden dar una tortillería así como una entrega única de 174 mil pesos al pastorcito poblano mutilado por la explosión de una granada en zona de entrenamiento militar el pasado 19 de julio del presente año. La tía del menor, Amparo Barragán Soperanez, en entrevista con este medio reveló lo anterior y adelantó que la familia del infante Oswaldo Zamora Barragán está muy molesta por la postura gubernamental, razón por la cual volverán a dar una conferencia ante medios de comunicación el próximo lunes 5 de diciembre del presente año en el Distrito Federal, muy cerca del Hospital Militar Central donde permanece internado el infante. Detalló que el gobierno del estado de Puebla ofrece al menor la entrega de una tortillería, en tanto que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) insiste en dar una cantidad única al infante por la cantidad de 174 mil pesos. Esto último, acotó, porque según los militares, el menor no tiene derecho a una indemnización militar ya que su padre o madre no pertenecen al Ejército Mexicano. Recordemos que los padres del pastorcito son personas de muy escasos recursos económicos. Incluso, el padre de Oswaldo, Bernardo Zamora Barragán, en el momento de la desgracia se encontraba laborando como mojado en los Estados Unidos. En tanto que la señora y el menor viven en una pequeña choza ubicada en la comunidad perteneciente al municipio de Petlalcingo. La tía del niño Oswaldo, Amparo Barragán Soperanez, adelantó que en la próxima conferencia ante medios de comunicación se mostrarán documentos fundamentales, relativos al Ejército Mexicano que, no se quiere otorgar pensión vitalicia al niño que, producto de la explosión, perdió su pierna derecha, brazo derecho, uno de los testículos, y está en riesgo de que le sea amputada la pierna izquierda. Finalmente cabe señalar que el infante el día de la tragedia llevaba sus chivos a pastorear a un llano, sitio que era ocupado para entrenamiento por parte de la XXV Zona Militar. Ahí se llevaban a cabo prácticas de tiro militar. Fue ahí donde el niño se encontró una granada que le explotó en el cuerpo.
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