Soldados regresan a cuartel en Tehuacán

**Tropas del XXIV Regimiento de Caballería combatieron al crimen organizado en el noroeste del país  TEHUACÁN  Mariana GUTIÉRREZ Corresponsal  DESPUÉS DE permanecer por dos meses en Culiacán, Sinaloa, combatiendo al crimen organizado, cerca de 350 soldados pertenecientes al XXIV Regimiento de Caballería retornaron sin ninguna baja y novedad a su cuartel general en Tehuacán. En medio de llantos, porras de bienvenida y una ceremonia oficial, los soldados del 24 regimiento fueron recibidos por sus esposas, madres e hijos, quienes desde el pasado 26 de diciembre del año anterior fueron enviados a la novena Zona Militar, en Sinaloa, para colaborar en una operación de gran impacto. En entrevista para El Popular, diario imparcial de Puebla, el coronel de caballería José Luis Vázquez explicó que estas acciones son designadas directamente por el Gobierno Federal en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). El militar de caballería dijo que lo más importante es que los 350 soldados regresaron vivos, lo que les permite seguir sirviendo a México, además de expresar “es un hecho muy significativo el regresar sin novedad y con el deber de haber cumplido a México y la Patria”. Es importante comentar que los soldados que tenían más de dos meses de no ver a sus familiares, estarán francos a partir de ayer, retornando a sus actividades el próximo lunes cinco de marzo. Por su parte y entrevistada por separado, la señora Martha, esposa de uno de los soldados que fue enviado a la operación contra el narco, reconoció que estos dos meses fueron un calvario para su familia, toda vez que había el temor de que ya no regresará con vida su esposo. Reconoció que para ella, al igual que para muchas esposas y madres de familia, el grado que tenga su pareja y el padre de sus hijos no es importante, lo más significativo es el honor de servir a México, además de que en cada misión siempre se juegan la vida por personas que ni siquiera conocen. Martha es madres de tres menores edad, y aún cuando sabe que su esposo Albertino Ramírez es soldado, siempre “anteponen a su país y luego a su familia y cada vez que salen a una misión es algo que dolerá pero que en sus hijos se ve reflejado porque expresan “mi papá es un héroe”.
  • URL copiada al portapapeles