*Afirman que existen casas de seguridad en diversos puntos de la ciudad, donde despojan a las víctimas de sus pertenencias  En municipios por donde migrantes viajan a través de tren, existen bandas del crimen organizado que los extorsionan sin que las autoridades hagan algo por frenar esta situación, denunció el sacerdote y coordinador de la Pastoral de Migrantes en Puebla, Gustavo Rodríguez Zarate. Lamentó la actitud de las autoridades en los ayuntamientos, al asegurar que estos actúan contra los que buscan el “sueño americano” y no accionan contra los delincuentes que tienen casas de seguridad en las poblaciones, a donde algunos son llevados para despojarlos de sus pertenencias y después abandonarlos sin un solo peso. Detalló que varios de los migrantes que logran llegar al templo de Nuestra Señora de La Asunción, ubicada en la colonia Aquiles Serdán, relatan que son detenidos por personas encapuchadas, quienes les quitan lo poco que llevan y los retienen por algunos días. La mayoría de los centroamericanos, víctimas de bandas delictivas, llevan entre 500 y mil dólares para sus gastos, dinero que con esfuerzo logran reunir para realizar la travesía. Ante los robos y secuestros, algunos se ven en la necesidad de pedir dinero en la Central de Abastos de la ciudad, en donde por dos o tres días junta alrededor de 300 pesos. La Bestia, tren en el que viajan, pasa por los municipios de Mazapiltepec, Soltepec y Rafael Lara Grajales, donde algunos migrantes descienden, ya que otros continúan su viaje a pie por la zona de Amozoc, para después subirse a los vagones en la capital. El cura activista señaló que las autoridades locales no deben impedir a los migrantes que sigan su paso, ya que así como se pide respeto a Estados Unidos para los connacionales que buscan cruzar la frontera norte, tampoco deben vulnerarse los derechos de los centroamericanos. “Quienes tienen suerte de llegar con nosotros al albergue son bien recibidos, pero siempre escuchamos que son asaltados o secuestrados en su camino, lo cual no pueden denunciar ante una autoridad del estado, porque si no serían deportados, por ello queda impune este delito a pesar de que nosotros señalemos”, apuntó. |
En municipios por donde migrantes viajan a través de tren, existen bandas del crimen organizado que los extorsionan sin que las autoridades hagan algo por frenar esta situación, denunció el sacerdote y coordinador de la Pastoral de Migrantes en Puebla, Gustavo Rodríguez Zarate. Lamentó la actitud de las autoridades en los ayuntamientos, al asegurar que estos actúan contra los que buscan el “sueño americano” y no accionan contra los delincuentes que tienen casas de seguridad en las poblaciones, a donde algunos son llevados para despojarlos de sus pertenencias y después abandonarlos sin un solo peso. Detalló que varios de los migrantes que logran llegar al templo de Nuestra Señora de La Asunción, ubicada en la colonia Aquiles Serdán, relatan que son detenidos por personas encapuchadas, quienes les quitan lo poco que llevan y los retienen por algunos días. La mayoría de los centroamericanos, víctimas de bandas delictivas, llevan entre 500 y mil dólares para sus gastos, dinero que con esfuerzo logran reunir para realizar la travesía. Ante los robos y secuestros, algunos se ven en la necesidad de pedir dinero en la Central de Abastos de la ciudad, en donde por dos o tres días junta alrededor de 300 pesos. La Bestia, tren en el que viajan, pasa por los municipios de Mazapiltepec, Soltepec y Rafael Lara Grajales, donde algunos migrantes descienden, ya que otros continúan su viaje a pie por la zona de Amozoc, para después subirse a los vagones en la capital. El cura activista señaló que las autoridades locales no deben impedir a los migrantes que sigan su paso, ya que así como se pide respeto a Estados Unidos para los connacionales que buscan cruzar la frontera norte, tampoco deben vulnerarse los derechos de los centroamericanos. “Quienes tienen suerte de llegar con nosotros al albergue son bien recibidos, pero siempre escuchamos que son asaltados o secuestrados en su camino, lo cual no pueden denunciar ante una autoridad del estado, porque si no serían deportados, por ello queda impune este delito a pesar de que nosotros señalemos”, apuntó.